Durante la campaña 2018, la producción de mango en Andalucía se ha incrementado hasta las 33.000 toneladas frente a las 20.600 de la pasada campaña, un 60% más. Este importante aumento se debe, principalmente, a dos factores: por un lado, la madurez de las nuevas plantaciones, que aportan cosechas más significativas a medida que pasa el tiempo; y, por otro, al rendimiento del cultivo, que se ha visto favorecido por una primavera suave y un verano exento de temperaturas extremas. En cuanto a la superficie en producción, se ha incrementado en un 13% respecto a 2017, situándose actualmente en 3.643 hectáreas.
En términos económicos, el incremento de producción comercializada ha venido a compensar el descenso de precios que ha caracterizado esta campaña, alcanzándose una cifra de negocios estimada de 32,64 millones de euros, un 26% superior a 2017.
Aunque la demanda en Europa ha sido buena, los precios se han mantenido bajo presión durante toda la campaña, obteniéndose cotizaciones por debajo de años precedentes. El arranque fuerte de la comercialización se retrasaba hasta mediados de septiembre encontrándose con un mercado escaso de oferta de otros orígenes, como Israel y Senegal. Estos países, habituales competidores de los primeros volúmenes de mango andaluz, anticipaban la finalización de sus campañas al contar con menos volumen este año. Por el contrario, Brasil adelantaba sus importaciones a octubre e introducía fuertes volúmenes de mango en el mercado europeo, coincidiendo con los picos más altos de la producción andaluza, forzando los precios a la baja durante prácticamente toda la campaña.
Las huelgas en Francia han influido en el final de la temporada impidiendo un remonte de los precios de las variedades más tardías, especialmente del Keitt. Debido a los bloqueos por carretera se producían retrasos en las salidas de producto a destinos europeos y, en algunas ocasiones, la fruta no llegaba con la calidad esperada, por lo que algunas cadenas han optado por proveerse del mango de Brasil, principalmente.
Por su parte, la calidad comercial del fruto ha sido siempre excelente, con coloración óptima y mayor proporción de los calibres más apreciados comercialmente, correspondiendo el 80% a la primera categoría y el resto a segunda. El precio medio de campaña del mango de primera categoría ha sido de 1,09€/kg. En el caso de la variedad Osteen, que representa el 75% del mango, su primera categoría cotizaba a 1,07€/kg frente a 1,01€/kg de la variedad Keitt, cuya representatividad es del 17%.
Las exportaciones, que incluyen tanto la producción andaluza como las importaciones, se incrementan en términos de volumen en un 68%, con 38.256 toneladas, frente al 18% del valor económico respecto a la campaña anterior.
Tres países acaparan el 74% de las exportaciones del mango procedente de Andalucía en 2018, entre los cuales destacan Francia (32%), Alemania (19%) y Portugal (18%).