Dar confianza al cliente. En un momento como el actual, se sale adelante dando confianza al cliente, y eso supone no aprovechar la incertidumbre y la inflación para hinchar los precios. Ahora más que nunca, el cliente de Family Cash se está dando cuenta de que, en nuestra compañía, estar al lado de las familias y su ahorro es algo que se puede comprobar en la cesta de la compra. Nosotros ya lo hemos corroborado en nuestro volumen de ventas, que sigue creciendo de manera firme y contundente. Hemos captado muchos clientes que antes elegían otras opciones y a quienes las circunstancias los han llevado a confiar en nosotros. Tenemos una idea clara y sabemos dónde queremos estar en 10 años.
Una relación directa. Nos enfrentamos a un escenario futuro de poca fruta, en general, ya que los agricultores cada día plantan menos y están exprimidos por una serie de intermediarios que cada vez los empobrecen más con las liquidaciones que ofrecen. El supermercado debería tratar directamente con el productor, comprar a un precio justo y vender en sus fruterías a otro razonable. Es la única manera de mantener el equilibrio en el sistema.
«Debemos apretarnos el cinturón, ser muy eficientes, no quedarnos en la zona de confort y rebajar los costes internos»
En nuestro caso, al estar en constante crecimiento, y gracias a que planificamos cada campaña, todavía nos podemos mover con cierta comodidad para conseguir los volúmenes que necesitamos. Nuestra cuota de mercado crece, y no solo en facturación, sino que, también en kilos, continuamos aumentando nuestras cifras. Los datos son realmente satisfactorios y refuerzan la filosofía de la familia Canet Ferrero.
Junto al proveedor. Nuestra estrategia no ha cambiado desde que abrimos la primera tienda: buen producto a un precio muy competitivo y de manera continua. No creemos en las ofertas de un día o un fin de semana. Ofrecemos el mejor precio todos los días de la semana, no queremos que nuestros clientes se sientan defraudados. Puesto que reducimos el margen de venta, lo compensamos con la planificación de fincas agrícolas, una más que eficiente logística y el ahorro de materiales. Por poner un ejemplo, en muchas ocasiones, y dependiendo del producto, lo recogemos de nuestro proveedor y repartimos directo a tienda sin pasar por la plataforma. Este año, además, tenemos varias fincas que estamos explotando junto a nuestros proveedores. Queremos estar y trabajar al lado del agricultor.
Su estrategia. Se avecinan tiempos difíciles y que tardaremos en superar. Todo depende de los ingresos que entren en casa y de cómo los gastemos. Si las familias tienen que destinar más dinero a la gasolina, el gas, la luz y la cesta de la compra, que son básicos imprescindibles, el consumidor va a estar más atento a las oportunidades de compra y la comparativa de precios, cuando antes no se fijaba mucho en el precio y sí en el aspecto del producto. Ahora esto va a cambiar, van a seguir mirando el aspecto, pero la compra se volverá más inteligente y meticulosa. La clave del éxito será precisamente esa: muy buen producto, bien presentado y a muy buen precio. Para llegar a ese objetivo hay que apretarse el cinturón, ser muy eficientes, no quedarse en la zona de confort y rebajar costes internos. Hasta el más mínimo detalle es importante para tener el producto en tienda cinco céntimos más barato.
3 claves
1. Relación directa con el proveedor.
2. Buenos precios todo el año.
3. Eficiencia en todos los procesos para rebajar costes internos.