El sector de la patata debe trabajar por una economía sostenible
Sevilla ha sido sede del V Congreso de la Patata Nueva de España, en el que se han dado cita más de 140 de profesionales del sector, así como representantes institucionales a nivel regional y nacional, para debatir en torno a ella y analizar la sostenibilidad del cultivo en el contexto actual, tanto normativo como de mercado.
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La situación del cultivo de la patata en la nueva PAC, las exigencias de calidad de la distribución, las limitaciones en el uso de fitosanitarios, las nuevas normativas de envases o de desperdicios alimentarios, entre otras cuestiones, han sido asuntos abordados en profundidad en el congreso.
La inauguración ha corrido a cargo de Vicente Pérez García de Prado, secretario general de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, y de Marco Román, presidente del Sector de la Patata de Asociafruit.
Por su parte, el director territorial Sur y Extremadura de Cajamar, Fran Martínez Ibáñez, abordó la coyuntura socioeconómica actual y destacó el papel principal que juega España en la producción de patata fresca, segmento en el que posee una oportunidad por la mayor capacidad de conservación respecto a la competencia, además de por su reconocida calidad. También puntualizó los retos que tiene ante sí el sector de la patata temprana, principalmente, la mejora continua a través de la incorporación de herramientas para la digitalización y el aprovechamiento del conocimiento; la sostenibilidad, tanto socioeconómica como medioambiental; y la dimensión, fundamental para continuar ganando mercados de exportación.
Posteriormente, ha intervenido Esperanza Orellana, directora general de Producciones y Mercados Agrarios del MAPA, quien ha analizado ‘El sector de la patata en la PAC’, que ha completado, para dar la visión desde el punto de vista del sector, Yolanda Medina, representante de ASOPOCYL y presidenta de la Interprofesional de la Patata de Castilla y León, con la presentación ‘El cultivo de la patata como sector estratégico en la agricultura española’.
A lo largo de la mañana ha tenido lugar también una Mesa Redonda en torno a ‘La sostenibilidad del cultivo de la patata ante las actuales exigencias del mercado’, que ha contado con la participación de Alfonso Sáenz de Cámara, presidente del Comité de la Patata de FEPEX; Marco Román, presidente del Sector de la Patata de Asociafruit; Joan Company, responsable sectorial de la Patata de ASAJA; Ángel Alonso, director del Departamento Agrario de PEPSICO; Aurelio del Pino, presidente de ACES; Mª Cruz Vaca, directora de Asuntos Económicos de ANGED; y Felipe Medina, secretario general técnico de ASEDAS. Esta mesa redonda ha sido moderada por Jose María Pozancos, director General de FEPEX.
Las últimas ponencias de la mañana han corrido a cargo de Pablo Rodríguez Porras, jefe de Área Subdirección General de Economía Circular del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien centró su discurso en ‘Nuevas exigencias normativas en materia de envases’, y de Ana Díaz, subdirectora general de la Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), que ha examinado la ‘Ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario. Consecuencias en el sector de la patata’.
El Congreso ha sido clausurado por el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz. Tras la clausura, tuvo lugar un acto de promoción de la patata nueva en la Nao Victoria, en el que Antonio Muñoz estuvo acompañado por el chef/influencer Dani del Toro para llevar a cabo el pelado de la primera patata de la campaña.
Patatas de Leyenda
Uno de los alimentos más importantes en nuestra sociedad actual es la patata, sus propiedades alimenticias han hecho de ella un elemento básico en nuestra dieta, salvando, incluso, a grandes poblaciones de tremendas hambrunas, como sucedió en Irlanda en el siglo XIX.
La leyenda nos dice que había unas plantas muy hermosas en el Hospital de la Caridad en Sevilla que eran cuidadas con esmero por una religiosa. Aquellas bellas flores salían de un tubérculo que los españoles había traído de América en el Descubrimiento y que los nativos comían, pero en Europa no se le había encontrado el uso alimenticio.
Sería en el siglo XVI cuando la carestía de alimentos llevó a la población a una gran hambruna, sin nada que comer la gente moría de hambre. La religiosa, recordando las palabras de Pizarro sobre el alimento de los nativos, fue al jardín y desenterró una patata, la metió en agua hirviendo y posteriormente hizo una especie de puré con ella. El resultado fue del todo apetecido, pues aquello sabía bien y era nutritivo. La leyenda prosigue indicando que la Virgen se apareció a aquellas religiosas, bajo la advocación de la Inmaculada Concepción, y bendijo aquellas patatas que, desde entonces, se encuentran como alimento destacado de nuestra dieta. Y es que la necesidad también puede ocasionar hallazgos gastronómicos casuales, como en esta ocasión.
Este Congreso está coorganizado con FEPEX- Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas- y ASOCIAFRUIT – Asociación Andaluza de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Frutos Secos, Flores y Plantas Vivas- y ha contado con el patrocinio para su organización de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía.
Datos de la campaña de siembra 2022
La campaña de siembra de patata nueva temprana ha finalizado con una superficie sembrada similar a la de 2021. Así lo han confirmado desde Asociafruit, cuyo Sector de Patata se ha reunido recientemente para analizar la evolución de la actual campaña de siembra. De esta forma, han podido constatar, en base a los datos de importación de semillas, que estamos ante una campaña que contará en las zonas tempranas de Cartagena y Andalucía Occidental con una superficie sembrada en torno a las 10.500 hectáreas según datos oficiales procedentes de ambas comunidades autónomas.
El sector asiste con gran preocupación e incertidumbre a las consecuencias del actual contexto político y económico, ya que por un lado está sufriendo- como todo el medio rural- las consecuencias de la subida generalizada de precios en todos los inputs necesarios para la producción, manipulación y transporte, y por otro, están aún por descontar los más que posibles efectos que la actual guerra en Ucrania, y sus consecuencias indirectas, pueden tener sobre el mercado y la campaña de comercialización.