En el corazón agrícola de Torre Pacheco, emerge la cooperativa SAT San Cayetano, donde más de tres generaciones de agricultores la han llevado a ser un jugador clave del sector murciano. En este contexto, profundizamos en la figura de Juan Carlos Martínez, un líder cuya conexión con la tierra y su gente le ha convertido en el pilar de su ascenso hacia la gerencia de SAT San Cayetano. Desde sus comienzos hasta su actual posición de influencia, la historia de Martínez es un testimonio de dedicación, aprendizaje y compromiso con los valores del campo.
Inicios
Martínez inicia su formación como estudiante en la Universidad de Murcia, donde se graduó en Derecho y Administración y Dirección de Empresas. Donde adquirió la base de su conocimiento y que le llevaría a su primer paso en el mundo laboral en Valfresh Export, una empresa del sector, donde ocupó el puesto de administrativo contable. Aquí, Martínez tuvo la oportunidad de sumergirse en el funcionamiento interno de una empresa y adquirir experiencia práctica en la gestión financiera y administrativa.
SAT San Cayetano
Sin embargo, en septiembre de 2018 se traslada a SAT San Cayetano lo que marcó un punto de inflexión en su carrera. Desde el momento en que se unió a la cooperativa como gestor de fondos operativos, Martínez demostró su valía y su capacidad para asumir responsabilidades cada vez mayores, como así demuestra su ascenso gradual dentro de la empresa, pasando de gestor a subdirector financiero.
Para Martínez, San Cayetano es más que una empresa; es su hogar. La estrecha relación que ha cultivado con los socios y el equipo humano de la cooperativa es uno de los pilares de su liderazgo. Su visión de la empresa se basa en “el trabajo, la constancia, el sacrificio y el señorío”, principios que, como explica, han guiado a San Cayetano a lo largo de sus 48 años de historia y que Martínez se compromete a preservar y transmitir a las generaciones futuras.
Mirando hacia el futuro, Martínez adopta una postura optimista y proactiva frente a los desafíos que enfrenta el sector agrícola. Reconoce los obstáculos, desde la inflación hasta la incertidumbre legislativa, pero confía en que, con un plan estratégico sólido y un equipo comprometido, SAT San Cayetano podrá navegar las aguas turbulentas y encontrar nuevas oportunidades de crecimiento y desarrollo.
Relevo generacional
Juan Carlos también reconoce la importancia del relevo generacional en el sector agrícola y la necesidad de atraer y retener a los jóvenes talentos. Para él, el campo ofrece una variedad de oportunidades desafiantes, que van más allá de la simple labor agrícola. Desde la investigación y el desarrollo técnico hasta el ámbito comercial, el sector agrícola está lleno de posibilidades para aquellos dispuestos a abrazar la innovación y el cambio.
En última instancia, el mensaje de Martínez para los jóvenes que dudan en unirse al sector agrícola es claro: “que no tengan miedo al campo, somos un sector disruptivo y no podemos verlo como algo primitivo”, añade que es un sector muy bonito y dinámico. “Aquí no te aburres, cada día pasa una cosa distinta y ninguna campaña se parece a la otra”, concluye Martínez animándolos a que se incorporen al sector, “porque una vez que estás dentro te cambia el chip completamente”
