El objetivo de estos planes es invertir en acciones y equipamiento para potenciar su competitividad y en todos los sistemas que garanticen la calidad de los cultivos que comercializa y exporta.
En el encuentro el presidente de Fruta de Andalucía, Manuel Alfaro, y el gerente de la cooperativa, Juan Manuel Vivas, expusieron todos los proyectos que esta empresa ha integrado en sus fincas e instalaciones agrarias dentro del cultivo de fresas, arándanos, frambuesas y moras, así como en almacenes y naves industriales para la manipulación y envasado de estos frutos rojos.
Estas inversiones están incluidas dentro del Programa de Ayuda Comunitaria del Fondo Operativo 2019 que gestiona la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía. Este programa hace posible que las organizaciones de productores de frutas y hortalizas reconocidas, como es el caso de Fruta de Andalucía, cuenten con apoyo financiero y económico de la Unión Europea para inversiones que permitan planificar la producción, mejorar o mantener la calidad de los productos, reforzar la comercialización o promover la investigación y la producción experimental.
El delegado de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía en Huelva, Álvaro Burgos, destacó el esfuerzo de las organizaciones de productores de frutas que operan en la provincia de Huelva por desarrollar sus propios programas operativos “con inversiones en continuo -ha señalado- para que nuestro sector de los frutos rojos siga siendo líder en la Unión Europea y se diferencie de otros países productores en más y mejor calidad”.
En concreto esta ayuda financiera correspondiente al programa 2019 asciende a 3,1 millones de euros, cantidad que se completa con la aportación directa que hacen las empresas del otro 50% del total del programa de inversión previsto. Asimismo, en el encuentro se analizaron algunos de los aspectos que inciden en la nueva campaña de frutos rojos que comenzará dentro de varias semanas, como es la disponibilidad de mano de obra y todo el conjunto de medidas que la Junta de Andalucía y las propias empresas de berries han acordado para controlar la incidencia del Covid-19 y reducir al máximo el riesgo de contagio.