Europlátano celebró el 25 Aniversario de su fundación
El crecimiento durante este periodo avala el éxito de este gran proyecto.
Comparte
Europlátano S.A. celebró ayer el pasado sábado 23 de septiembre en su sede de Los Llanos de Aridane el 25 Aniversario de su fundación, un emotivo acto que sirvió para repasar la trayectoria de esta organización, referente en el sector, y para reconocer la labor de las personas que han hecho posible el firme avance de este proyecto. El acto estuvo presidido por Narvay Quintero, consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, y Francisco Lorenzo Speranzini, presidente de Europlátano S.A., y contó con la presencia de numerosas autoridades, entre las que se encontraban consejeros del Cabildo de La Palma, alcaldes de la isla y diputados, además de socios, trabajadores y clientes de Europlátano.
Un total de 44 socios decidieron fundar Europlátano en septiembre del año 1992. En aquel entonces, con una producción de 5 millones de kilos, un centro de empaquetado, 20 empleos y un ámbito de actuación circunscrito al Valle de Aridane. Las cifras actuales avalan el éxito de un proyecto en constante crecimiento. Hoy en día cuenta con 717 socios, 7 centros de empaquetado, 304 empleos directos, una producción cercana a los 60 millones de kilos, una superficie de cultivo de unas 1.100 hectáreas y un ámbito de actuación que incluye las islas de La Palma, Tenerife y El Hierro. Algunas de las familias que forman parte del proyecto se han dedicado al cultivo del plátano durante más de cien años. La primera constancia documental de la existencia de platanera en La Palma data de 1613 y sitúa su cultivo en una finca propiedad de uno de los socios de Europlátano.
Durante el acto se reconoció la labor de los presidentes que desde su creación ha tenido la organización. Rosendo Luis Cáceres (1997-2004); Enrique Luis Larroque del Castillo Olivares (2004-2006); Antonio Carrillo Díaz (2006-2014) y Francisco Lorenzo Speranzini (2014-actualidad) y a título póstumo a Antonio Carrillo Kábana, primer presidente de Europlátano. (1992-1997). También se reconoció, a título póstumo, el trabajo y esfuerzo en pro del proyecto de Carlos Aciego de Mendoza Cabrera, primer secretario de Europlátano; Ángel Hernández Lorenzo, miembro del primero Consejo de Administración; y Juan Pedro Hernández Martín, socio fundador.
El presidente de Europlátano, Francisco Lorenzo Speranzini, destacó en su intervención el papel fundamental que juegan los miembros de esta entidad. “Hablamos de familias, porque Europlátano es más que una sociedad. Es una sucesión de generaciones que se caracterizan por su amor a la tierra y a un cultivo que en Canarias crea idiosincrasia y paisaje. Somos conscientes de que la calidad es fruto del esfuerzo perseverante y de que el mejor capital de nuestra empresa son las personas que la forman, unidas a una reputación que tanto ha costado ganar y que tan poco cuesta perder”, aseveró.
Asimismo, incidió en la constante necesidad de buscar la excelencia para mejorar y para garantizar la continuidad del proyecto. “Exigentes con lo que hacemos, somos impenitentes críticos e inconformistas con nuestro trabajo. Europlátano es una muy buena muestra de que la pericia de nuestros agricultores, unida a su tradicional vocación exportadora, resultan un formidable activo en cualquier mercado que apueste por la calidad y la innovación”, afirmó. En este sentido, y ante un panorama que se presentaba novedoso en los primeros años de su nacimiento, recordó que “había que marcarse nuevos objetivos: mejorar la calidad, incrementar el rendimiento de las fincas, escalonar su producción y recuperar nuevos mercados europeos. El mercado se abría a la competencia, a la presencia de la banana de todo tipo y origen, a multinacionales acostumbradas a posiciones dominantes en los distintos mercados internacionales en los que operaban sin restricciones y a una fuerte restructuración e incluso desaparición de los operadores comerciales tradicionales. A pesar de todo ello”, enfatizó, “Europlátano creció sin interrupción desde su creación, porque supo vislumbrar las grandes oportunidades que ofrecía la nueva situación y adaptarse a los nuevos tiempos. Sus socios crearon una sólida empresa con objetivos claros y definidos, a los que aportaron generosos recursos humanos y económicos, convirtiendo sus explotaciones agrícolas en el mejor ejemplo de cómo producir un plátano que evoluciona según la demanda de un consumidor cada día más exigente”.
Speranzini puso en valor la figura de los socios, trabajadores y clientes en el éxito de este proyecto: “Europlátano no se entiende sin sus socios, que son propietarios de una empresa a la que sienten y quieren. Pero también Europlátano debe mucho a sus trabajadores, que hacen posible que ese plátano, tan primorosamente producido en las fincas, pueda llegar a sus mercados de destino cumpliendo los más exigentes criterios de calidad. Y no menos importantes, nuestros clientes, a quienes tan agradecidos estamos por su contribución decisiva y apasionada a la existencia de nuestra empresa, comprometidos como lo están con un producto que es algo más que una fruta”.
Por último, Francisco Lorenzo Speranzini se refirió al futuro del proyecto y a las claves para seguir adelante. “Europlátano apuesta por un futuro que, a pesar de las indudables incertidumbres que presenta, puede deparar grandes sorpresas. Esfuerzo, calidad e innovación son las claves que deben seguir presidiendo nuestra actividad en los próximos años, incrementando nuestra presencia en los mercados internacionales y mimando un mercado nacional al que tanto debemos. No podemos olvidar que nos debemos a nuestros clientes, quienes hacen posible que Europlátano sea una realidad y que miles de familias puedan prosperar. Son los legítimos deseos de esos clientes los que deben guiar nuestra producción y comercialización, pues sin ellos nada somos”.
El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, felicitó a todos los que forman en la actualidad Europlátano y que recogen el testigo de “aquellos 40 agricultores que hace 25 años tuvieron la valentía y la visión de fundar lo que es hoy esta empresa”. Quintero incidió también en la calidad y la competitividad como elementos diferenciadores. “Europlátano ha apostado desde el primer momento por la calidad. El consumidor, hoy en día, es cada vez más exigente y eso es algo que avala a Euro plátano. La apertura de mercados es fundamental y somos conscientes de que Europlátano también trabaja en ese campo. La unión del sector ha hecho que las muchas dificultades que se han presentado hayan sido superadas con valentía, trabajo y esfuerzo. Y también la unión y la innovación en el sector del plátano de Canarias han hecho posible que todo ese esfuerzo de tanta gente sea reconocido”.
Quintero destacó también la importancia de un sector cuyo protagonismo es fundamental en las Islas. “El sector pone en valor el trabajo de muchos hombres y mujeres del campo y también da muchísimo a Canarias. La imagen del plátano de Canarias es una imagen muy potente y que todos deberíamos agradecer, porque esa imagen que se proyecta fuera de Canarias, que han conseguido todos ustedes, no solo le viene bien al plátano, a los agricultores y a las cooperativas, sino que le viene bien a toda Canarias. El plátano es cultura, tradición y apego a la tierra. Hay que luchar para que siga siendo el sector mayoritario de la exportación y para que Europa entienda las singularidades de Canarias y del cultivo del plátano, para que cuando firma esos protocolos con países terceros entienda que puede hundir sectores tan importantes ligados a empleo, a la sociedad, al paisaje, a la cultura de una tierra como es Canarias”, afirmó.
Cerró el turno de intervenciones el vicepresidente de Europlátano, Enrique Luis Larroque del Castillo Olivares, quien incidió en que “no es una empresa al uso. No hay trabajadores y directivos. Aquí hay socios en el sentido estricto de la palabra. Personas que caminan en una misma dirección, con una misma idea y con un mismo propósito, que no es sino el mantenimiento de lo que sus padres y sus abuelos les legaron y por lo que tanto lucharon, trabajaron y sufrieron”. Además, dijo que el plátano es más que un producto comercial y una fruta: “Es una manera de ver la vida, de entender la vida, de mirar al pasado y de agradecer a nuestros mayores. Nuestro producto no existiría sin todas esas personas y empresas que día a día defienden el plátano canario, que prefieren el plátano canario y que transmiten sus bondades. A todos ellos nuestro agradecimiento, porque día a día hacen que nuestro campo siga mejorando. El plátano canario es un producto magnífico porque lo hacen personas y lo hacen con pasión, con sentimiento. En la idea de una constante mejora subyace la gran riqueza de Europlátano”, concluyó.
El acto finalizó con la actuación del músico palmero Carlos Sosa y con la celebración de un aperitivo en las instalaciones de Europlátano.