Sin embargo, desde Ecovalia, asociación de referencia en este ámbito, advierten que no basta con crecer en superficie. “El aumento de hectáreas es positivo, pero el sector necesita un plan estratégico que garantice un crecimiento sostenible”, señala Álvaro Barrera, presidente de Ecovalia.
El alcanzar el 25% de la superficie agrícola útil (SAU) dedicada a producción ecológica para 2030 sigue siendo un reto importante. Actualmente, España está en un 12,5%, por lo que Barrera insiste en que es imprescindible mantener y reforzar los apoyos a los agricultores ecológicos. “Si queremos llegar a ese 25%, las políticas públicas deben acompañar el crecimiento con apoyos a los productores que aseguren el desarrollo del sector”, añade.
Pero además de la superficie, otro aspecto clave es la transformación y comercialización de productos ecológicos. En 2023, la industria ha crecido un 9%, pero el consumo ecológico en España sigue siendo bajo, representando solo el 3,5% del total alimentario. El objetivo del sector es alcanzar el 10% en 2030. Para ello, Ecovalia apuesta por impulsar las compras públicas de alimentos ecológicos y campañas que promuevan el consumo responsable. “El consumidor está cada vez más preocupado por el impacto ambiental de sus decisiones, pero es vital luchar contra el greenwashing que genera confusión”, indica Barrera.
Desde Ecovalia también subrayan que el éxito del sector no puede medirse solo en hectáreas, sino en la capacidad de llevar productos ecológicos a las mesas de los consumidores. Para ello, se necesita un plan estratégico que impulse la innovación en la transformación, facilite la comercialización y promueva el consumo.
“El camino hacia 2030 requiere un esfuerzo conjunto entre el sector, las administraciones y la sociedad. La producción ecológica es clave para enfrentar los retos globales, pero necesita más que crecimiento en superficie para alcanzar su máximo potencial”, concluye Barrera.