La Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente de la Región de Murcia realiza un ensayo sobre aplicación de agua ionizada en cultivo de lechuga iceberg, con el objetivo de conseguir un mayor ahorro de agua en riego, así como disminuir los daños ocasionados por hongos y bacterias tales como botrytis y sclerotinia.
El ensayo se lleva a cabo en el Centro de Demostración y Transferencia Tecnológica ‘El Mirador’ (San Javier).
El ozono es un gas que actúa como desinfectante natural capaz de destruir virus, bacterias y hongos. No se acumula ni deja residuos. Una vez realizada su función se convierte en oxígeno.
Por ello el agua ionizada consigue plantas con más fuerza, colores más vivos por efecto de la oxidación del ozono, desarrollo más rápido, fruto de mayor volumen, jugoso y homogéneo, mayor producción por planta, más cosecha en menos tiempo, así como una reducción del tiempo de producción.
La directora general de Innovación Agroalimentaria, Juana Mulero, destacó que la elección de la lechuga iceberg para este ensayo se justifica por ser “el producto que mayores cifras aporta a la exportación hortofrutícola murciana”. En 2015 se exportaron 501.985 toneladas por un valor de 423 millones de euros. En este sentido, añadió que “la Región de Murcia suministra cerca del 70 por ciento de la lechuga exportada por España”.
Para los agricultores de la zona es importante la transferencia de nuevas técnicas de cultivo que consigan el ahorro de recursos como el agua e insumos para obtener mayor rentabilidad en sus producciones, así como para la conservación del medio ambiente.
El ensayo abarca una superficie de 1.400 metros cuadrados. El material vegetal utilizado es la lechuga iceberg, cuyo tallo tiene en su inicio forma de disco, del que surgen las hojas formando rosetas que posteriormente se convierten en cogollo.
El ensayo cuenta con un plan de eficiencia medioambiental que incluye, entre otros aspectos, el uso de programas de riego para evitar un consumo innecesario de agua, mediante sensores de alta precisión para el control efectivo del fertirriego.
También incluye las normas de producción integrada para el abonado y el Código de Buenas Prácticas Agrarias para evitar la contaminación de acuíferos y de suelos por nitratos.
Los principales beneficiarios de este estudio serán los agricultores socios de las tres cooperativas del mencionado centro (Hortamira, Gregal y S.A.T. San Cayetano), así como los agricultores del Campo de Cartagena, empresas relacionadas con la comercialización, técnicos y estudiantes.
La Consejería realizará una memoria anual con los resultados del proyecto, así como publicaciones técnicas. También se llevarán a cabo visitas para dar a conocer las instalaciones del Centro ‘El Mirador’.
Fuente: Hortoinfo