Limitación en el uso de fitosanitarios
Alfonso Lucas, consultor experto en plagas, enumeró tres cambios que deberían producirse para tener “visos de esperanza” en el desarrollo del sector frutícola. En primer lugar, consideró que tanto las instituciones como la sociedad y medios de comunicación deberían dejar de demonizar el uso de productos fitosanitarios: “La gente consume medicamentos sin tener en cuenta los efectos adversos y, sin embargo, en las plantas consideran que las estamos envenenando si aplicamos fitosanitarios y lo que hacemos es sanarla”.
En segundo lugar, Lucas ve imprescindible hacer una separación clara entre política y alimentación en las legislaciones para poder preservar sin problemas nuestra soberanía alimentaria. “Si seguimos así, nuestros sectores de fruta se hundirán y tendremos que ir a comprar a países terceros donde aplican productos fitosanitarios prohibidos aquí desde hace más de 30 años y acabaremos comiéndonos esa fruta”, detalla.
En tercer y último lugar, para Lucas hay que volver a crear los grupos de transferencia de conocimiento que tenía hace años la administración y eliminó, grupos de trabajo no ligados a empresas del sector para que el agricultor esté debidamente formado e informado.
Por su parte, Miguel Ángel Gómez, gerente de Afruex, añadió al respecto que era imprescindible no prohibir productos fitosanitarios antes de tener una alternativa, a lo que Lucas añadió que era evidente esta afirmación ya que para lograr soluciones de control biológico o de manejo, era necesario tener tiempo al menos ante la aparición de nuevas plagas. En cualquier caso, Lucas confía en que “la naturaleza y el conocimiento humano resolverán el problema como ha podido comprobar a lo largo de sus más de 40 años de experiencia”.
En este asunto, Miguel Ángel Gómez quiso destacar la necesidad inmediata de que se aplique con eficacia la nueva directiva comunitaria de autorización de fitosanitarios que divide a la UE por zonas y no se está aplicando. “Si un producto está autorizado en un país de la zona sur, automáticamente debería poder usarse en los otros países de esa zona y, sin embargo, esto no sucede, se pierde en un sinfín de burocracia”, comenta. En este sentido, ya no se trata solo de que haya cláusulas espejo con países terceros, sino que los propios miembros de la UE no tienen las mismas herramientas, compiten entre sí.
Mano de obra
El sector de fruta de hueso requiere una cantidad ingente de mano de obra representando más de un 40% de su coste de producción. En apenas dos meses y medio, se necesitan miles de trabajadores que resulta difícil encontrar cada temporada. Por ello, desde Afruex trabajan de forma conjunta con las diferentes administraciones para el contrato de mano de obra en origen y que se lleve a cabo a través de una concatenación de campañas, es decir, de la fresa a la fruta de hueso, después a los cítricos, etc. De esta forma, asegurarían empleo más estable y todo el año. “El problema viene cuando tenemos que hacer el contrato en origen ahora en noviembre, es imposible calcular cuánto volumen vendrá en la campaña y, por tanto, cuánto personal necesitaremos, habría que posponer este contrato al mes de abril donde ya lo tendríamos más claro”, apunta Gómez.
En la mesa redonda también participó Isabel Ramos, técnico del Servicio Extremeño Público de Empleo (SEXPE), quien explicó las herramientas que tiene este organismo para incentivar la colaboración público-privada en el sector agrícola de fruta de hueso extremeño. “Tenemos un sistema que está en marcha desde solo hace 10 días con un servicio online, tanto para registrarse como demandante de empleo como para solicitar personal por parte de las empresas y que animamos a utilizar”. En el caso de las empresas agrícolas o cooperativas, sugiere programar con tiempo la necesidad de personal para que el SEXPE pueda gestionarlo con la mayor eficacia posible.
Ramos aprovechó su ponencia para dilucidar los factores que llevan a que la cifra de parados agrícolas en la región sea de 7.000 y el número de vacantes no descienda. La dispersión geográfica, la despoblación de zonas rurales, las condiciones de empleo y estacionalidad del trabajo, la no renovación generacional y las políticas pasivas como prestación por desempleo o subsidio, son algunos de los motivos, tal y como explicó. En este último punto, aclaró que se había aprobado una nueva normativa que permitía compatibilizarlo con el trabajo de forma que el trabajador no perdiera la ayuda, “algo favorable para la contratación de personal agrícola”.
Esta mesa redonda fue el colofón de un amplio programa de ponencias técnicas que volvieron a poner sobre la mesa la importancia del sector de fruta de hueso extremeño con la celebración del IV Foro Ibérico de Fruta de Hueso Xtrema Fruit, organizado por Agromarketing España y que ha tenido más de 700 inscritos, de los que más de 300 acudieron a la jornada presencial en el Auditorio Feval de Don Benito (Badajoz) de forma presencial y el resto lo siguió de forma online.
En el Congreso se analizaron temas como los nuevos trips, presentaron un nuevo producto para el control de monilia de Kenogard y las posibilidades de automatización del cultivo por Agromillora, se habló de nutrición avanzada, de innovación varietal por parte de Frutaria, de digitalización y muchos otros temas solo en la primera jornada presencial celebrada el día 20 de noviembre, que fue seguida de una online con más contenidos de interés para el sector de fruta de hueso.
