El parlamento felicita a la distribución alimentaria por su labor en la pandemia
El director general de ASEDAS ha comparecido ante la Mesa del Congreso de la Comisión de Industria, Comercio y Turismo, donde ha presentado 10 propuestas para la recuperación.
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Entre ellas, la recuperación de la “normalidad normativa”, la contención fiscal, el fortalecimiento de la cadena de valor agroalimentaria, la lucha contra el absentismo laboral y contra el hurto multirreincidente.
Los representantes de los grupos parlamentarios que participan en la Mesa de la Comisión de Industria, Comercio y Turismo en el Congreso de los Diputados han destacado durante la sesión de hoy la labor que han realizado los trabajadores y las empresas de la distribución con base alimentaria, que, en circunstancias muy complicadas, han conseguido garantizar la seguridad en los establecimientos y el abastecimiento de alimentos y otros productos básicos.
Ignacio García Magarzo, director general de ASEDAS, Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados, ha comparecido ante este foro, donde, en nombre de los 260.000 trabajadores de las empresas de ASEDAS, ha agradecido este reconocimiento a su capacidad de entrega, dedicación y sentido de servicio a la sociedad.
Además, el director general de ASEDAS, asociación que aglutina alrededor del 70% de la superficie de la distribución alimentaria en España, ha expuesto diez medidas que, desde el sector, pueden contribuir a la recuperación rápida de la economía.
- Seguir considerando a la alimentación, en general, y a la distribución alimentaria, en particular, como un sector esencial para la sociedad española. Este reconocimiento ha sido fundamental para garantizar el abastecimiento de alimentos en los últimos meses y debe ayudar a seguir haciéndolo en el futuro.
- Volver a la “normalidad normativa”. Según datos de la Comisión de Comercio, Competitividad y Consumo de CEOE, el incremento de la presión normativa sobre el sector comercial durante el Estado de Alarma ha sido del 572 por ciento. Esta circunstancia, comprensible en las semanas anteriores, no puede mantenerse por las dificultades y el coste que supone para las empresas.
- No incrementar la presión fiscal ni sobre los consumidores ni sobre las empresas, para apoyar la recuperación del consumo, imprescindible en estos momentos y aún muy vulnerable.
- Fortalecer la cadena de valor agroalimentaria. Ante los problemas de sostenibilidad de las explotaciones, la distribución quiere ser parte de la solución, que pasa, fundamentalmente, por crear cooperativas más grandes y mejores con capacidad para estructurar la oferta, defender los productos en el mercado y permitir a los productores no estar condicionados por riesgos como el clima o las cosechas, entre otros.
- Mantener la reforma laboral, en línea con lo expresado por CEOE, y especialmente en lo relativo al orden de prevalencia de los distintos convenios colectivos. En el ámbito laboral, la negociación colectiva es una herramienta de diálogo pactada con los sindicatos que se ha mostrado muy útil en los distintos ámbitos –provincial, autonómico y de empresa-, para adaptarse a las circunstancias de cada tipo de empresa y región, en beneficio de la competitividad y de los trabajadores.
- Mejorar la lucha contra el absentismo laboral, que en España es más alto que la mayoría de países de la Unión Europea. Se trata de una conducta insolidaria con el sistema sanitario, con los compañeros y las empresas que se debe controlar mejor, con más inspecciones, la ayuda de las mutuas y, sobre todo, con concienciación social.
- Luchar contra el hurto mutirreincidente de bandas organizadas, que revenden los productos en la economía sumergida. Según el estudio de CEOE, esta actividad cuesta a las arcas públicas más de 300 millones de euros al año y afecta muy negativamente, sobre todo al pequeño comercio de alimentación. La solución pasa por una reforma del Código Penal para que las medidas que se contemplan actualmente puedan aplicarse con eficacia.
- Abrazar la economía circular. La recuperación económica deberá ser verde, circular y sostenible. El futuro pasa por reducir los envases y el plástico cuando sea posible garantizando, en todo caso, la recuperación de todos los materiales para su reciclaje, sin olvidar la seguridad alimentaria.
- Reforzar el compromiso social de las empresas con la colaboración de empresas, organizaciones sociales y administraciones públicas en el ámbito de la ayuda alimentaria, en el que las empresas del sector ya están volcadas.
10. Propiciar el diálogo y el consenso entre sectores económicos, sociedad civil y administraciones públicas para aportar juntos soluciones ante los debates regulatorios en el comercio como el de los horarios y apertura en festivos.