El melón Galia, la gran asignatura pendiente
Superado hace años el ‘examen’ de la sandía, el sector se ha esforzado por profesionalizar también el cultivo de melón, algo que ha logrado en Cantaloup, Amarillo y Piel de Sapo, si bien se sigue resistiendo en el Galia de invernadero. Entrevista a Chema Fernández, responsable de melón de Unica.
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Un difícil comienzo
De “muy complicado” califica Chema Fernández, responsable de melón de Unica, el inicio de la campaña en Almería como consecuencia de las inclemencias climáticas, que dificultaron la polinización, reduciendo la producción y minando la calidad. Y la situación no fue mejor para la sandía: “Hemos tenido partidas con un destrío de hasta el 40% por problemas de ahuecado”, lamenta, por su parte, Loli Rodríguez, responsable de este cultivo.
Pese a todo, cuando hablamos con ellos a principios de mayo, se percibe cierto optimismo en sus palabras. Poco a poco, las plantaciones que sí cuajaron adecuadamente entrarán en producción y todo apunta a que la demanda será la deseada. Esto, unido a una menor oferta de melón y sandía, y también de fruta de hueso, podría activar el consumo.
La cara y la cruz en melón
Unica mantiene esta campaña su superficie de melón Amarillo, Cantaloup y Piel de Sapo en Almería, si bien ha reducido sus hectáreas de Galia a cifras apenas testimoniales, unas 15. “En la provincia seguimos teniendo problemas de calidad”, apunta Fernández, quien añade que esto no solo desanima a la cooperativa, sino también a los productores, cada día más “reacios” a cultivar este melón.
“En el resto de tipologías, y gracias al esfuerzo de todas las empresas del sector, hemos logrado profesionalizarnos, cortando el melón en su punto óptimo para ofrecer al mercado la mejor calidad”, explica, aunque reconoce que “el Galia continúa siendo nuestro punto flaco”. Para Fernández, su recuperación pasa actualmente por dar un vuelco al sistema de cultivo apostando por el entutorado; de este modo, el fruto no está en contacto con el suelo y, por tanto, su calidad no se ve perjudicada. “El año pasado tuvimos algún agricultor que cultivó Galia entutorado con buenos resultados, y también lo hacemos en Cádiz, con nuestra cooperativa socia Virgen del Rocío, aunque en este caso son melones para consumo nacional”, comenta. Mientras tanto, aboga por el cultivo en Almería del resto de tipologías que sí funcionan, y circunscribe su producción de Galia a Murcia, donde cuentan con 180 hectáreas y, además, han logrado adelantar su campaña tres semanas.
En sandía, Freshquita
En sandía, confían en Freshquita, su marca de referencia y cada día más reconocida en el mercado nacional. “Los clientes ya la piden por su nombre”, afirma Loli Rodríguez, quien insiste en que su único objetivo es “ofrecer una buena calidad para que, cuando la sandía llegue al consumidor final, la valore y repita la compra”.
Para seguir incentivando su consumo, Unica realiza promociones en puntos de venta que, este año, han contado con el nutricionista Aitor Sánchez. Además, a través de su e-commerce La Caja Saludable, ya tienen disponible su Caja Combo, con más de 7 kilos de melón y sandía de distintos tipos y formatos.