La Asociación de Productores de Cítricos del Sur de África ha revisado a la baja las estimaciones de exportación de naranjas para la temporada 2024. Las extremas condiciones invernales han azotado Sudáfrica con vientos, lluvias torrenciales y heladas que han causado importantes daños no sólo a la fruta, sino también a las infraestructuras agrícolas y de transporte.
«Si bien al principio de la campaña algunos profesionales temían que hubiera una superproducción de naranjas, las diversas circunstancias que se han producido desde entonces tienden a demostrar que esta campaña no será del todo satisfactoria», apuntan.
Ante esta situación, la Asociación ha hecho un nuevo ajuste a la baja en las últimas cifras de exportación proyectadas para Navels, mientras que la categoría de naranjas Valencia recibió su mayor recorte proyectado de la temporada, impulsado principalmente por eventos climáticos extremos reportados recientemente en regiones productoras clave.
El número previsto de cajas de 15 kilos de naranjas Navel que se espera exportar es ahora de 21 millones, continuando la trayectoria descendente que se inició en mayo, cuando la estimación de apertura de la temporada de 25,7 millones se redujo a 22 millones. Esta última revisión eleva la reducción total de la temporada a un 19%.
Actualmente, las Navel tardías se están empaquetando y enviando a medida que la temporada de Navel llega a su fin.
Por su parte, para las naranjas Valencia, las regiones productoras clave de Limpopo y Mpumalanga están muy avanzadas con su temporada, mientras que los productores del Cabo Oriental y Occidental recién comenzarán a envasar sus primeros volúmenes Valencia en serio en las próximas semanas.
El último volumen proyectado de cajas de 15 kg de naranja Valencia de exportación que se espera que exporten los productores del sur de África es ahora de 51,6 millones, por debajo de la previsión de mayo de 56 millones y de la estimación de apertura de temporada de abril de 58 millones, una reducción del 11% con respecto a la primera estimación.
Los mayores ajustes a la baja reflejados en el último informe proceden de las zonas de Letsitele, Hoedspruit y Senwes (Marble Hall y Groblersdal); de hecho, Marble Hall y Groblersdal también se vieron muy afectados por los recientes daños por heladas, lo que redujo aún más las previsiones de producción.