La casa de semillas Enza Zaden organizó el pasado jueves, día 14, un webinar en colaboración con Kantar en el que se analizó el nuevo perfil del consumidor durante la crisis sanitaria. Bajo el título ‘¿Cómo han cambiado los hábitos de compra de frutas y hortalizas durante el confinamiento?’, Ricarda Lenz y José Zafrilla, ambos Insight Senior Consultants de Kantar, dibujaron ese nuevo perfil y señalaron que es el momento de “detectar nuevas oportunidades de negocio” para el sector hortofrutícola. Para ello, es clave conocer al nuevo consumidor.
Entre las muchas conclusiones expuestas, llama la atención el rejuvenecimiento del consumidor de frutas y hortalizas. En este sentido, y según expuso Zafrilla, si hasta ahora los mayores de 65 años suponían el 58% de los consumidores de estos productos, durante el confinamiento ha crecido el número de compradores de entre 35 y 49 años, que han pasado de representar el 16% al 32%; y el de 50 a 64 años, que ahora son el 34,5% frente al 27% de antes de la crisis. Los mayores de 65 años alcanzan en estos momentos una cuota de mercado del 25%.
Las ocasiones de consumo en el hogar han crecido un 25% y, si de los 28 momentos de consumo semanal pre-COVID, 23 tenían lugar en el hogar, ahora son 27. El consumidor come más en casa, cocina más, y visita menos veces el supermercado –compra frutas y hortalizas dos veces por semana-, aunque sus cestas de la compra son más grandes.
De este modo, solo desde la semana 12 a la 17 (del 16 de marzo al 26 de abril), el número de cestas de la compra ascendió a 71,1 millones y, en ellas, el consumidor no renuncia a las frutas y hortalizas que, de hecho, aumentan su presencia un 6,9% y un 6,5%, respectivamente.
Representan el 70% del total de frescos perecederos, que asciende a 17 kilos semanalmente (3,6 kilos más que antes del confinamiento). De ellos, 6,1 son frutas y 5,8 son hortalizas; esto es, 0,9 kilos de frutas y 1,1 kilos de hortalizas más que antes del confinamiento. O lo que es lo mismo, ahora compramos, 2 kilos más de frutas y hortalizas a la semana.
El gusto por estos productos unido al rejuvenecimiento de su público objetivo es una buena noticia para el sector que, en cualquier caso, deberá esperar para ver si, una vez comience la ‘nueva normalidad’, estos hábitos se mantienen.
