‘Generación Coprohníjar’ es un proyecto de la cooperativa nijareña presidida por Juan Segura que constituye una apuesta de futuro tan novedosa en su forma como sólida en su concepción.
Según publica este miércoles La Voz de Almería, la cooperativa ha preparado 26 hectáreas de invernadero que están siendo cedidas a agricultores socios de la entidad en condiciones preferentes y muy atractivas, fundamentalmente, pensando en el relevo generacional. De hecho, el proyecto se gestó hace años para apoyar y promover la continuidad de la actividad agrícola a partir de las familias de agricultores que conforman y constituyen el principal capital de esta cooperativa almeriense.
Adjudicaciones
El proceso ha sido complejo y arduo, como corresponde a la puesta en marcha de nuevas fincas de invernadero, pero ya se han comenzado a adjudicar las explotaciones, previo sorteo entre todos los socios aspirantes a contar con un invernadero dotado de todo lo necesario; es decir, “llave en mano”.
Esta primera fase de entrega comprende cinco explotaciones de las diez que integran el proyecto en su totalidad, y que se sitúan en el paraje Haza la Reina, del término municipal de Almería. Están dotadas de placas solares para el suministro eléctrico y cada una dispone, además, de un embalse y almacén agrícola con un sistema automatizado de riego, caminos de acceso espaciosos y zonas de ensanche para el manejo de la explotación de una forma cómoda y eficiente.
En un breve plazo de tiempo, Coprohníjar ofrecerá las otras cinco explotaciones que completan el proyecto, que serán adquirirlas a través de un arrendamiento con opción de compra.
Coprohníjar, empresa pionera en aplicar los métodos de producción integrada, se convierte ahora también en la primera cooperativa hortofrutícola que aborda el relevo generacional a través de un proyecto tangible. ‘Generación Coprohníjar’ recibió el premio Economía Sostenible en la categoría ‘Relevo Generacional’ en la primera edición de esos galardones que instituyó La Voz de Almería junto a Agrobank-Caixabank.
Fuente: La Voz de Almería