Las olas de calor son un fenómeno meteorológico cada vez más frecuente, con temperaturas extremas que afectan a los cultivos de todo el mundo, causándoles una serie de problemas severos de estrés que pueden llevar a la disminución de la cosecha y de su calidad o incluso llegar a acabar con el cultivo, haciendo de puerta de entrada a plagas y enfermedades.
Esta problemática asociada al estrés hídrico hace que no llegue suficiente agua a las hojas, por lo que estas cierran sus estomas tratando de conservar la mayor cantidad de agua y eso lleva a que se detenga el crecimiento de la planta; decrezca, al gastar más energía de la que recibe, y muera al tener que consumir sus propias reservas.
Estos golpes de calor pueden producir también caída de frutos en la fase de maduración y afectar a la coloración, produciendo quemaduras en hojas y brotes, destruyendo la clorofila y llevando a la muerte a partes el tejido. La falta de agua en las hojas provoca también que el calcio vaya a estas en lugar del al fruto.
Ante esta situación, la tecnología de Ecoculture se convierte en una poderosa herramienta de ayuda a reducir estas situaciones de estrés provocadas por la ola de calor. Así, XStress contiene una mezcla de micronutrientes con un nuevo sistema de formulación que penetra en las estomas de las hojas con facilidad, mejorando el crecimiento del cultivo en estas condiciones de temperaturas extremas.
Esta tecnología refuerza las paredes celulares y fortalece los procesos naturales que el propio cultivo genera para neutralizar las toxinas oxidativas que se producen en los tejidos de la planta, mejorando el periodo de vida útil del fruto tras su recolección y aumentando su valor a lo largo de la poscosecha. Además, XStress ha conseguido la certificación para ecológico.
Junto a esta herramienta, Ecoculture cuenta con otra tecnología, Blush, que mejora el color del fruto acelerando la formación de pigmentos de color, siendo también un producto apto para ecológico, mientras que CalFlux permite a la planta absorber y mantener los niveles de calcio en las zonas que presentan síntomas de deficiencia, particularmente en el fruto, aumentando la resistencia de los tejidos a diferentes patologías y evitando trastornos fisiológicos.