El Comité de Gestión de Cítricos (CGC) y Cooperatives Agro-alimentàries de la Comunitat Valenciana, las dos asociaciones que vienen negociando desde hace semanas el convenio de collidors valenciano con los sindicatos de clase (UGT-PV y CCOO-PV), alertan de que la propuesta salarial y en materia de contratación de éstos últimos para renovar el convenio resulta inadecuada por cuanto afectaría de lleno a la competitividad del sector citrícola valenciano en relación al resto de operadores españoles, poniéndolo en inferioridad de condiciones frente al resto de operadores que actúan en el escenario internacional. Además, consideran que el incremento en los costes de producción afectará negativamente a las ya muy mermadas rentas de los agricultores, tal y como ya manifestó el pasado viernes la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), una de las principales organizaciones representativas de los productores citrícolas valencianos, que remarcó que “los precios de los cítricos se fijan desde la cúspide de la cadena de valor, es decir, desde la gran distribución” y no desde los operadores que los comercializan.
La postura de los representantes sociales se ha mantenido inflexible desde que arrancaron las negociaciones, sin que en ningún momento considerasen cuál es punto de partida de este sector ni la complicada situación por la que atraviesa, con serios problemas estructurales y coyunturales que afectan a la cadena de valor de los cítricos. Tampoco parece haberse considerado la ‘singularidad histórica’ de este convenio, pues el de collidors es una excepción en el panorama agrario nacional, tanto citrícola como hortofrutícola: con un significado contenido social, es el único que de ámbito autonómico (salvo Murcia, que es una región uniprovincial), que atiende a la particular estructura de la propiedad valenciana -minifundista- y en virtud de tal cosa es el operador el que asume las labores de contratación para la recogida de los frutos.
UGT-PV y CCOO-PV persisten en reclamar un inasumible incremento salarial anual para los cuatro años de vigencia, de un 8% así como, entre otras cuestiones, cambios relevantes en cuanto a la remuneración del trabajo a destajo y a jornal que incrementarían los costes generales y de gestión empresarial.
La situación de partida, como se avanzaba, no parece estar siendo considerada. Como refleja el cuadro que a continuación se expone, el actual convenio de collidors valenciano ha venido penalizando a la citricultura de la Comunitat frente a la de otras regiones productoras, como Murcia o Andalucía, donde el coste de la recolección se sitúa entre un 25 y un 36% por debajo del caso valenciano. Es más, también supone un agravio comparativo con respecto a las condiciones salariales de otros muchos cultivos, especialmente los hortícolas, cuya recolección se realiza en condiciones ergonómicas mucho más difíciles (agachado) y en cambio remuneran tal labor en un porcentaje entre un 27 y un 36% por debajo del caso de los collidors (que trabajan mayoritariamente erguidos).
Comparativa del actual Convenio de Collidors valenciano con el de recolección de otras provincias:
Salario bruto por hora trabajada (en euros) | Diferencia respecto al Convenio de Collidors (en %) | |
Convenio de Collidors de la CV*
|
10,24 | |
CC Cooperatives Camp Tarragona
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7,64 | -25,3% |
CC de Sevilla para las faenas agrícolas, forestales y ganaderas
|
6,8 | -33,59% |
CC Recolectores Cítricos de Murcia
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6,71 | -34,47% |
CC Agropecuario de Valencia
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7,32 | -28.51% |
CC Agropecuario de Alicante
|
6,54 | -36,13% |
CC Agropecuario Navarra
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7,06 | -31,05% |
CC Campo Toledo
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7,20 | -29,68% |
CC Campo Granada
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7,11 | -30,56% |
CC Agropecuario de Cantabria | 7,40 | -27,7% |