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isponer de un sello que certifique la calidad del producto es una de las mejores herramientas comerciales que se puede tener. Así está siendo para los productores y comercializadores de la cereza en el Levante español, que adscritos a la Denominación de Origen Cereza Montaña de Alicante están alcanzando un excelente posicionamiento para su fruta en los principales mercados nacionales e internacionales. Existe por tanto un interés generalizado por aumentar la producción certificada y acogida a este sello de calidad, pues los negativos resultados de campañas pasadas, se han debido, en la mayoría de las ocasiones, a una pérdida de la producción y no por un desinterés del mercado o presión en los precios. “Tan sólo pudimos certificar el 40% de nuestro potencial adscrito, debido a la adversa climatología que tuvimos cuando el fruto ya había cuajado. A pesar de ello, nuestra fruta es cada vez más demandada, una cereza que destaca por su calidad y por la precocidad con la que llega a los mercados”, explica Marcos Simón, presente de la C.R. de la D.O. Cereza Montaña de Alicante.
En este sentido, desde esta denominación, están focalizando todos sus esfuerzos en informar y animar a los agricultores a acometer la tan necesaria renovación varietal, por materiales menos sensibles a esos cambios tan bruscos en la climatología, con menor requerimiento de horas frío y una mayor resistencia una vez formado el fruto.
Otra de las cuestiones que denota el interés por agricultores y comercializadores por esta fruta certificada es que desde zonas limítrofes a las actuales acogidas a la denominación, se está solicitando su adhesión a la misma. Una cuestión que según Simón corresponde a Bruselas autorizar. “Para nosotros sería una buena noticia, pues necesitamos disponer de una mayor producción bajo el sello. Solo así podremos ganar cuota de mercado y responder a las exigencias de los clientes en lo que a volumen se refiere”, comenta el presidente.w