Un campo de ensayo como escaparate mundial. EUROSEMILLAS

En breve arrancarán las visitas de clientes procedentes de todo el mundo. Eurosemillas se ha dotado de un campo de ensayos en Huelva que pretende ser una referencia en las variedades adaptadas a la zona y un escaparate mundial de todos sus materiales exclusivos. De su nuevo proyecto, ubicado cerca de Lepe, deben salir los modelos de futuro que persigue la empresa, entre ellos una fresa de “largo recorrido” para que, con un mínimo de variedades, se cubra el máximo de la campaña con una calidad estable, según explica Francisco Jover, director técnico de la empresa.

El agricultor se muestra más que cauto ante la gran oferta varietal que inunda el mercado de las fresas. Ya no está tan dispuesto a probar cosas nuevas. Así que Eurosemillas cree que hay que recortar este abanico en el futuro y rebajar las opciones para facilitar el trabajo de los productores. Por la vocación global de la empresa, se centran en investigar selecciones que puedan adaptar a diferentes zonas productoras del mundo, añadiendo el extra de que encajen además en el clima mediterráneo bajo plástico de Huelva. Es el objetivo claro del nuevo campo de ensayos de Eurosemillas. Algunas de las variedades “se están comportando muy bien, con buena precocidad, color, vigor y forma de fruta, por lo que en unos tres años podrían estar en el mercado”, según los cálculos del técnico.

Para la selección del campo de ensayo se han elegido unos “terrenos duros y una zona de clima más adverso que otras del entorno. Aquí es donde una variedad te va a demostrar si vale o no vale”, en palabras de Jover. En dos hectáreas de cultivo, se mostrarán materiales de distintos orígenes. La futura fresa de largo recorrido que inspira los trabajos de la empresa, además de garantizar el sabor, un requisito irrenunciable de cuaquier variedad, también deberá aportar otra característica fundamental para Eurosemillas: vida útil postcosecha.

En cuanto a los últimos lanzamientos, sobresale en resultados la variedad Fronteras, que en esta campaña ha doblado el número de plantas por su mayor rendimiento, lo cual le permite al agricutor “conseguir kilos antes”. Con respecto a las otras dos variedades precoces, San Andreas y Petaluma, la primera se ha mantenido y la segunda, asociada a una fresa de mayor calidad, también ha experimentado un avance.

Las dos más recientes, Fronteras y Petaluma, destacan por su continuidad en la calidad de la producción, desde el principio hasta el final de la campaña. Jover afirma que el mercado prima los materiales que den grandes rendimientos y hasta que no se consoliden las nuevas variedades “va a seguir acudiendo a lo que conoce”.

Fronteras tiene como fuerte que le afectan poco las condiciones atmosféricas, mientras que Petaluma es más sensible a los días fríos. Cuando las campañas son templadas no hay diferencias, pero cuando son frías como la presente, ésta ultima se resiente más y el crecimiento se ralentiza. “Se trata de una propuesta con la que nos hemos quedado cortos en vivero porque hubo menos multiplicación de la esperada. El sector se ha quedado con ganas de más”.