“La prioridad es la resistencia al virus del rugoso”. SYNGENTA
La casa de semillas Syngenta tiene claro que este año el objetivo es introducir la resistencia al Virus del Rugoso en variedades competitivas, que tengan la producción y la calidad esperada sin poner en riesgo el suministro de tomate al mercado.
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Prioridad
Si bien en 2022 Syngenta se centró en la sostenibilidad, la calidad o el sabor, una vez alcanzado estos hitos, 2023 se traduce en el reto de incorporar a sus variedades de tomate la resistencia al Virus Rugoso (ToBRFV). Conscientes de las consecuencias que tendría para la producción una incidencia mayor del virus.
Mercados
España, Marruecos, Holanda o Turquía, grandes productores de tomate, comparten problemas similares, virosis y costes de producción disparados. Así, el coste de la energía afecta mucho más a los países del norte de Europa y las preocupaciones sobre el agua son más importantes en el sur. Desde Syngenta tienen en cuenta todas estas tendencias para responder localmente a estos desarrollos con variedades adaptadas.
En Holanda, Syngenta se está centrando en introducir la resistencia al Virus del Rugoso en las variedades de babyplum y rama, adaptándose a las condiciones de cultivo en días cortos y utilizando calefacción o luz artificial. También están introduciendo tomate de racimo de buen calibre resistente al ToBRFV.
Para Marruecos se encuentran desarrollando resistencia a rugoso en sus variedades de babyplum, rama y de calibre medio-alto con resistencia intermedia al virus del rugoso. Sin olvidar, el Cherry pera con muy buen sabor, en la tipología rama y en calibres grandes con tamaño sobre los 200 gramos.
Para Turquía la prioridad es el tomate suelto de calibre medio y alto junto con la rama, aunque también están organizando grandes pruebas en racimo de calibre medio para los ciclos de otoño, invierno y primavera.
