La falta de mano de obra, el mayor problema de la fresa. BERRIES
La contratación en origen no cubre ni el 20% de la demanda global que requiere el sector, que es de hasta 90.000 trabajadores en total.
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El sector de los frutos rojos de Huelva ha sido noticia de portada un año más en los medios de comunicación por el desinterés de los desempleados de trabajar en el sector: 23.000 empleos ofertados y solo 970 solicitudes de temporeros españoles, según el Servicio Andaluz de Empleo. La contratación en origen no cubre ni el 20% de la demanda global que requiere el sector, que es de hasta 90.000 trabajadores en total.
En la tercera provincia con más paro de España, ¿por qué los españoles no quieren trabajar en la fresa? ¿Cómo logran satisfacer los empresarios esta demanda? Son muchos los factores que provocan esta situación. Consultamos a diferentes actores del sector para conocer su punto de vista y las soluciones que proponen para este serio problema que, hoy por hoy, ya está limitando al sector para seguir desarrollándose y plantea un verdadero reto de futuro.
1. ¿Cuáles son los motivos reales que bajo su punto de vista provocan esta situación?
2. ¿Qué solución sugieren ante este grave problema de falta de mano de obra?
Rafael Domínguez, gerente de Freshuelva
– Son los meses de abril y mayo los que tienen mayor necesidad de mano obra para la recolección de frutos rojos, siendo el periodo con más volumen que recolectar. Una fecha en la que se produce una carencia de personal debido al desarrollo de otras campañas agrícolas (fruta de hueso, cítricos, etc.) y a la demanda de trabajadores por parte del sector servicios que proceden en buena parte del sector agrícola.
- La solución que se está llevando a cabo es la contratación en origen de personal para recolección de frutos rojos, aunque se debe mirar hacia nuevas técnicas de cultivo y, en algún fruto concreto, mecanizar la recolección en la medida de sus posibilidades.
Javier Palacios, presidente de la Asociación de Viveristas
– Hay un mar de fondo. Socialmente sigue estando mal considerado trabajar en el campo, tópico que ha calado en la sociedad. Entonces los jóvenes no se incorporan al campo, los mayores se van jubilando. Nadie quiere trabajar en el campo. En el año 2.000 ya traíamos mano de obra rumana, porque tenían periodos de trabajo en el campo obligatorio y una cultura del esfuerzo adquirido. Ahora están mayores, han hecho el dinero suficiente para mandar a sus hijos a la universidad y ya no vienen a España. Además, están en una edad que o bien cuidan de sus padres o de sus nietos, de ahí el fenómeno social de porqué el colectivo rumano ya no viene a la fresa de Huelva. Los jóvenes por su parte, se van a Alemania a trabajar a 10€ hora en lugar de a 5 € hora en España. La demanda se ha multiplicado por cinco estos años en el país germano e incluso los viveros polacos tiran de Rumanía.
Por otra parte, el desarrollo agrícola en Marruecos ha multiplicado la demanda de trabajadores allí, que también se van a Alemania. Los jóvenes tampoco quieren el campo y los colectivos que vienen ahora de Marruecos son los que no quieren en el propio país. Todo esto es un poco el fondo del asunto. Además, las condiciones laborales que desgraciadamente han ofrecido muchas empresas en España han sido lamentables, así como las de vivienda. De forma paralela, los trabajadores prefieren los campos de frambuesa, arándano o los hidropónicos de fresa, para no estar agachados con temperaturas altas bajo un invernadero. Estamos en una sociedad más acomodada. Otro asunto que agrava la falta de mano de obra es que el PER hace mucho daño porque hay una economía sumergida, porque no se quieren dar de alta. En cuanto tienen las peonadas, ya no desean trabajar más. Para mi finca en Huelva, de 50 ninguno quería darse de alta.
– Hay países como Ucrania y Moldavia a los que podríamos acudir para realizar un convenio bilateral porque requieren de oferta laboral que nosotros podríamos paliar. Además, son países con una cultura cercana y tradiciones más próximas a España. En viveros y frutos rojos no hay mecanización posible. Se puede paliar con la tendencia hacia hidropónicos que hace más cómodo al trabajador la cosecha y dado que no va a haber fumigantes de suelo por la prohibición de materias activas.
Enrique Acción, secretario provincial de COAG Huelva
– El cultivo de los frutos rojos necesita mano de obra debido a la dureza del trabajo en el sector agrario y de su labor, especialmente en el cultivo de la fresa, uno de los motivos por el que los trabajadores que recolectan el fruto, si pueden eligen otras producciones y abandonan el sector. Por ello, muchos empresarios piden la contratación en origen para asegurar la mano de obra necesaria para la recolección de su cosecha.
- Los empresarios apuestan por conseguir mano de obra de contratación en origen dentro de la Unión Europea, pero otra posible solución sería incentivar a los trabajadores con un plus de fidelidad por estar contratados la campaña completa hasta el fin de recolección de la cosecha. Además, otra opción que están llevando a cabo los empresarios es concatenar varias producciones para así poder mantener la plantilla el mayor tiempo posible durante el año.
Aurora Martínez, CC.OO. Industria Andalucía.
– Pensamos que es debido a las malas condiciones laborales del campo. Los salarios son muy bajos y, por tanto, los temporeros, si encuentran otro trabajo mejor, se van. Se dirigen a otros convenios del campo en otras zonas o bien a otros sectores. Además, las ofertas que salieron en el SAE no estaban bien especificadas y no se acudió tampoco a los ayuntamientos a nivel local, que es donde la gente suele ir a buscar el empleo del campo. Asimismo, las ofertas se pusieron con demasiado tiempo de antelación.
– Sería necesario cambiar no solo el convenio en sí, sino las condiciones generales del régimen agrario porque a estos temporeros se les considera siempre trabajadores eventuales, con lo que ello conlleva. Inseguridad de ser contratado de un año para otro, por lo que buscan otro trabajo, estabilidad cara a las entidades financieras e imposibilidad de cobrar ayudas. Lo ideal sería considerarlos fijo discontinuos, para que puedan contar con la seguridad de volver a trabajar para la misma empresa.