“El control biológico frenará al cotonet de Sudáfrica”. KOPPERT
De hecho, Koppert ya ha conseguido muy buenos resultados con las sueltas de Cryptobug (Cryptolaemus montrouzieri), que en breve esperan complementar con la avispa parásita Anagyrus aberiae.
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Una apuesta de futuro
La progresiva desaparición de materias activas y el desarrollo de protocolos eficaces para controlar las principales plagas que afectan a los cítricos son dos argumentos de peso a la hora de apostar por el control biológico en estos cultivos. Y, de hecho, así lo han considerado muchos productores en los últimos años, como afirma Juan Miguel Rodríguez, Citrus Manager de Koppert, quien apunta que, “en 5 o 6 años, ha habido un crecimiento exponencial de la superficie”. Solo en el caso de Koppert, ya gestionan en torno a 25.000 hectáreas de cítricos con control biológico.
Plagas bajo control
“Tenemos soluciones para las principales plagas que afectan a estos cultivos, es decir, los piojos rojo y blanco, la araña roja y el cotonet”, comenta Rodríguez, que sobre esta última hace una importante diferenciación: Planococcus citri (el cotonet más común en las distintas zonas productoras) y Delottococcus aberiae (también conocido como cotonet de Sudáfrica o de Les Valls y que está causando estragos en la Comunidad Valenciana).
Para el control de Planococcus citri, Koppert cuenta con un protocolo ya consolidado, basado en la suelta de forma preventiva de Citripar (Anagyrus vladimiri) y de Cryptobug (Cryptolaemus montrouzieri) para la gestión de focos. “Empezamos con las sueltas en primavera, al final de la floración, y continuamos durante el verano, dependiendo del nivel de infestación”, explica Rodríguez, quien insiste en la importancia de la prevención para un adecuado control de las plagas.
«Estos protocolos reaccionarán antes ante plagas emergentes que los tratamientos químicos»
Cotonet de Sudáfrica
Rodríguez no duda un segundo: “Finalmente, será el control biológico el que frene esta plaga”. Y en ello trabajan ya desde Koppert. De momento, y gracias a las sueltas de Cryptobug, “hemos conseguido muy buenos resultados”. Desde el pasado mes de agosto, además, están realizando ensayos en campo con la avispa parásita Anagyrus aberiae, específica para el control de esta especie de cotonet. “Esperamos tener muy buenos resultados pronto y, a partir de ahí, diseñar un protocolo eficaz, con las dosis y momentos de suelta totalmente definidos”, explica.
Para Rodríguez, el avance del control biológico en cítricos es ya imparable. Primero, porque se ha mostrado como una solución eficaz para el control de plagas y, además, es económicamente viable; y en segundo lugar, “porque será capaz de reaccionar antes al control de plagas emergentes que los tratamientos químicos”. Ya lo ha hecho con el cotonet de Sudáfrica, para el que existen varias materias activas autorizadas y, hasta la fecha, “no están siendo capaces de controlar la plaga”, concluye el Citrus Manager de Koppert.
3 razones para usar el control biológico
• Desaparición de materias activas.
• No genera resistencias en las plagas.
• Mayor rapidez de respuesta ante plagas emergentes.