“El aguacate español no tiene competencia”. FRUTAS EL CERVAL

El devenir de Frutas El Cerval corre paralelo al del propio sector de los subtropicales en la costa granadina. La firma inició su andadura hace diez años y, en los últimos cinco, ha logrado duplicar su volumen de producción hasta alcanzar los 5 millones de kilos. Más de la mitad, en torno a 3 millones de kilos, son de aguacate, fruta que comercializa todo al año, unos 700.000 kilos corresponden al mango y el resto se reparte entre chirimoya y níspero.

Nos reunimos con su gerente, Gregorio Jiménez, para analizar el inicio del nuevo ejercicio. Y se nota que la campaña está empezando. Durante nuestro encuentro en sus oficinas de Almuñécar a finales de agosto, el trasiego es continuo, hasta el punto de que, en varias ocasiones, Jiménez se ve obligado a interrumpir la entrevista. “Acabamos de empezar a recolectar mango”, nos dice y, como ya comentaran desde otras empresas del sector, coincide en que “este año habrá menos kilos, aunque no creo que se llegue a un 25% menos, hay plantaciones jóvenes que están entrando en producción y eso podría, en parte, compensar las pérdidas de los árboles más viejos”.

“La firma exporta el 70% de su producción, la mitad a Francia

Con respecto al aguacate, augura un buen ejercicio. Esta fruta sigue estando de moda, su consumo crece alentado por sus beneficios para la salud y, para Jiménez, el sector aún no ha tocado techo. Preguntado por la competencia de países terceros como Colombia, cuyo volumen de exportación aumenta, o Perú, que “ha ganado en calidad”, el gerente de Frutas El Cerval afirma sin dudar que “el aguacate español no tiene competencia” y es precisamente su origen una de sus mayores bazas para competir.

La firma comercializa sus subtropicales bajo las marcas Frutas El Cerval, Bañuelos y Teresa, tres sellos con los que busca ofrecer diferenciación a sus clientes. Exporta el 70% de su producción, prácticamente la mitad a Francia, mientras que el 30% restante se queda en el mercado nacional.

Proyectos
El año pasado, adquirieron una nueva máquina calibradora que, cada temporada, hay que poner a punto para mejorar su funcionamiento y que les ha permitido dar respuesta a sus mayores volúmenes de producción con una calibración y envasado rápidos y eficientes. De cara al futuro, tienen claro que apostarán por la producción bio, pero ese proyecto, de momento, tendrá que esperar.

130 ha
5 millones de kg