Es una realidad que cada vez hay más empresas productoras que apuestan por el cultivo ecológico, sin embargo, la firma granadina Procam comenzó este proyecto hace ya 12 años, de forma que cuenta con una importante experiencia que le otorga la máxima garantía en sus producciones. Tanto es así que, hoy por hoy, este segmento representa más del 80% de su volumen, por lo que se ha convertido en un referente del sector en la costa mediterránea.
Ante la fuerte presión competitiva en precios que se ha dado en los dos últimos años en el sector del ecológico, para luchar contra esta situación y lograr una mayor diferenciación, Procam dispone de las certificaciones más exigentes, más allá de los sellos de GlobalGAP y el de Agricultura Ecológica, como son Biosuisse Organic, Naturland (Alemania) y USDA Organic (EE.UU.). Y no se detiene ahí, ya que se preocupa por trabajar en consonancia con el entorno, a través de la lucha integrada con polinización de abejas, utilizando extractos naturales y materia orgánica certificada, energía solar fotovoltaica en sus centrales, y rodeado de montes y fauna, con un agua pura procedente de Sierra Nevada. Con todo esto, no solo demuestra su apuesta por la sostenibilidad, sino que integra la biodiversidad dentro de su producción agrícola.
Con el objetivo de transmitir toda esta excelencia en su labor, la empresa ha renovado su página web y presenta un nuevo vídeo corporativo, y próximamente desarrollará las redes sociales para estar más cerca de sus clientes y de los consumidores.
A nivel nacional, la entidad está presente a través de su marca Bioprocam, que cada vez cuenta con una mayor penetración en el mercado, representando el 20% de su volumen de negocio.
Amplio catálogo
Desde sus comienzos, para Procam, el pepino holandés bio siempre ha sido su principal cultivo, seguido del aguacate y el tomate rama, si hablamos de grandes volúmenes. Pero poco a poco han ido ampliando su catálogo ecológico, con producciones minoritarias que complementan su oferta como son mango, tomate Marmande, calabacín, berenjena, pepino francés, judía, y las últimas incorporaciones, calabaza, boniato y cítricos (limón y naranja).
“Bio Procam es OPFH y los socios están invirtiendo en modernizar sus fincas pero sobre todo en aguacate y en mango, cultivos en los que creemos que existe un importante colchón de crecimiento aún”, explica Fernando Martín, gerente de la firma.