Ana Pérez, la líder de los productos bio de Gruventa

Su carrera profesional ha girado en torno a las frutas y hortalizas ecológicas, de ahí que su llegada a Gruventa fuera directamente para ocupar el puesto de máxima responsabilidad dentro de ese departamento. A diario contacta con proveedores, tanto asociados como no, para lograr tener toda la mercancía que sus clientes le demandan a nivel internacional, aunque también nacional, mercado que tiene muy presente y que está potenciando.

Ana Pérez reconoce que entablar un primer contacto con proveedores como clientes, por el hecho de ser mujer, sí le cuesta en aquellos casos donde su interlocutor es un hombre de mayor edad, pero superado ese primer escollo, la relación profesional es totalmente normal, fluida: «igual que la habría entre dos hombres, pero sí es cierto que tienes que demostrar que estas preparada aunque sea más joven que con quien hablo, que eres seria y tan profesional como cualquier otro compañero. Pero incluso, también se da el caso contrario, que por el hecho de ser mujer he tenido acceso antes a un cliente, aunque luego se materializa el negocio por tu profesionalidad sin tener en cuenta el género».

Pero lo que sí es cierto es que Ana se ha tenido que enfrentar, a lo largo de su carrera profesional, con situaciones delicadas, lo que le han llevado a marcar claramente unos límites: Si hay que hacer una reunión laboral, se hace en la oficina, desayunando o mediante una comida de trabajo, pero la jornada acaba por la tarde….por lo que las cenas quedan para la familia.

En definitiva, ser hombre o mujer no debería determinar qué tipo de relación profesional se establece, simplemente se deberían medir las cualidades de cada una de las persona.