En el próximo Consejo de Ministros de la UE del día 23, en el marco del Diálogo estratégico sobre el futuro de la agricultura en la UE, habrá una oportunidad para que se ponga de manifiesto la necesidad de la utilización herramientas de edición genética para que los agricultores de la UE puedan seguir suministrando alimentos y materias primas de forma sostenible, y generar unos ingresos dignos. También, la necesidad de comunicar a la sociedad la opinión de la ciencia sobre las mismas para evitar la polarización en el debate.
Al día siguiente, el miércoles 24 de enero, la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo votará las enmiendas a la propuesta de la Comisión sobre NGT, entre las que se incluye el conocido CRISPR. Esta propuesta es una oportunidad para incorporar los avances de la ciencia en la obtención de nuevas variedades vegetales, donde España es líder mundial`.
La ciencia no se detiene y los retos de nuestra agricultura son cada vez más acuciantes, es necesario poder trasladar lo más rápido posible los avances científicos al desarrollo de nuevas variedades de plantas. El campo español necesita urgentemente herramientas asequibles para hacer frente al cambio climático y que contribuyan a la sostenibilidad de la agricultura en nuestro país, como ya ocurre en muchos otros países que tienen reguladas estas técnicas. Variedades más eficientes en el uso de los recursos (como las variedades resistentes a sequía) o variedades resistentes a plagas y enfermedades que además contribuyen a la reducción del uso de plaguicidas, pueden ser obtenidas mediante estas técnicas.
La propuesta de la Comisión sobre NGT está alineada con el consenso científico. Entre las últimas iniciativas se encuentra una Carta abierta firmada por 35 premios Nobel y más de 1000 científicos solicitando al Parlamento Europeo que «rechacen la oscuridad del alarmismo anticientífico» y voten a favor de las nuevas técnicas genómicas. Cabe recordar que la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) también concluyó que las plantas obtenidas mediante mutagénesis dirigida y cisgénesis, las reguladas en esta propuesta, no presentan ningún peligro nuevo en comparación con las plantas desarrolladas mediante mejora convencional.
La estrategia europea «De la granja a la mesa» identifica específicamente estas nuevas técnicas, incluida la biotecnología, como seguras para los consumidores y el medio ambiente y que aportan beneficios a la sociedad en su conjunto, como una herramienta para aumentar la sostenibilidad de los sistemas agroalimentarios y contribuir a garantizar la seguridad alimentaria.
La regulación de estas técnicas beneficia al sector agrícola español directamente, ya que podrá seguir liderando el desarrollo de variedades de cultivos de una forma rápida y asequible, permitiendo a muchas PYMEs y centros públicos españoles desarrollar nuevos programas de mejora, ya que su facilidad de aplicación permite trabajar con cultivos minoritarios o menos rentables económicamente. Es una oportunidad para remarcar el liderazgo de nuestros investigadores y apoyar la colaboración público-privada en un campo que será clave para la lucha contra el calentamiento global.
Las entidades asociadas Anove cuentan con más de 60 centros de I+D+i en España y reinvierten un 20% de su facturación en I+D+i. Disponen de instalaciones con la última tecnología y están preparadas para aplicar los últimos avances científicos con el objetivo de poner a disposición de los productores el mejor material vegetal de reproducción, como ya lo están haciendo países competidores nuestros.