El secreto de TRIANUM® es la cepa T-22 de Trichoderma harzianum, que es la cepa perteneciente a la familia del hongo beneficioso Trichoderma más agresiva contra los patógenos.
La cepa T-22, producida y comercializada en exclusiva por Koppert, es muy eficaz en todo tipo de suelos. A diferencia de otras cepas comerciales, la T-22 tiene el mayor rango de temperatura en suelo por permanecer activa entre los 8 y los 34 grados y con niveles de pH entre 4 y 8,5. Es en ese intervalo cuando germinan sus esporas y la T-22 despliega toda su acción protectora frente a patógenos. Además, la cepa T-22 es una de las pocas cepas de Trichoderma con registro europeo para su venta (Inscrito en el Registro Oficial de Productos Fitosanitarios con el nº 25.889) y con autorización para su uso en agricultura ecológica (Registro CAAE).
La cepa T-22 se ha obtenido mediante hibridación. Después de un completo y exhaustivo proceso de selección, se eligieron dos cepas de Trichoderma harzianum con muy buenas propiedades de resistencia a enfermedades. Una de estas cepas funciona muy bien a altas temperaturas y en condiciones secas, mientras que la otra actúa mejor en condiciones frías y húmedas. Ambas cepas fueron cruzadas y el resultado fue TRIANUM®.
Fungicida con doble acción
Una de las características que mejor definen a esta exclusiva cepa es que su agresividad natural hace que en un tiempo récord colonice el sistema radicular de la planta protegiendo las raíces y destruyendo a los patógenos al mismo tiempo que la cepa se expande, aumentando y prolongando en el tiempo los beneficios de este hongo que es un eficaz fungicida y un valioso protector biológico de las plantas.
Mediante los ensayos que Koppert ha realizado con esta cepa desde 1999, se ha demostrado que la Trichoderma T-22 es un hongo beneficioso que actúa como escudo protector frente a patógenos al mismo tiempo que previene enfermedades fúngicas de raíz, como Fusarium, Sclerotinia, Rhizoctonia, Phytium y nematodos. Además, actúa como promotor de crecimiento, ya que incrementa la producción de raíces secundarias y produce un mayor crecimiento radicular, similar a un enraizante, porque TRIANUM® es capaz de metabolizar sustancias que mejoran la nutrición vegetal.
TRIANUM® ofrece una alta compatibilidad con la mayoría de fitosanitarios que se utilizan habitualmente en la agricultura y permite, incluso, las mezclas en tanque. A diferencia de muchos fungicidas convencionales, TRIANUM® no detiene el crecimiento de la raíz o de la planta y reduce significativamente la producción de plantas no óptimas.
Más protección y más producción
Los ensayos realizados por el departamento de I+D de Koppert han confirmado que la cepa T-22 de Trichoderma puede sustituir a algunos fungicidas convencionales del suelo, consiguiendo reducir los insumos químicos. En un semillero de ornamentales, en el que se aplicaban convencionalmente dos fungicidas preventivos, se compararon con la aplicación de la cepa T-22 a las plántulas de pascuero en las mesas de propagación. Se observó que el porcentaje de pérdidas era igual en las mesas tratadas con fungicidas químicos que con Trichoderma harzianum en comparación con las no tratadas en las que las pérdidas eran el doble.
En cuanto a producción, los ensayos de Koppert confirman que la cepa T-22 de TRIANUM® puede aumentar la producción hasta un 20%. En un ensayo realizado en tomate se observó que el mayor precio del tomate coincidía al principio de campaña, en el momento que más diferencias existen entre las plantas tratadas y las no tratadas con Trichoderma.
Entre otros beneficios añadidos, la cepa T-22 reduce los tratamientos tanto en semillero como en el cultivo, no tiene plazo de seguridad y puede usarse en agricultura convencional, en producción integrada y en agricultura ecológica. TRIANUM® es completamente seguro para las personas y el medio ambiente, y no tiene efectos fitopatógenos sobre los cultivos. La enorme versatilidad de TRIANUM® se traduce en un importante ahorro para el productor.