Estas retiradas del mercado, que serán financiadas en el marco de los programas operativos de las organizaciones de productores de frutas y hortalizas (OPFH), se dirigirán a entidades caritativas que, a su vez, cerrarán contratos con la industria para obtener zumo y néctar. El MAPA ha precisado que una parte de la cantidad entregada a los fabricantes de zumos y néctares se utilizará como pago en especie por los gastos de transformación.
La directora general de Producciones y Mercados Agrarios del MAPA, Esperanza Orellana, mantuvo la semana pasada varias reuniones con las organizaciones representativas del sector citrícola en las que, según las mismas fuentes, se analizó la situación del sector. Orellana puso de manifiesto en dichas reuniones que «el Ministerio está siguiendo de forma exhaustiva las importaciones citrícolas procedentes de terceros países, particularmente las originarias de Sudáfrica».
Ante este nuevo cupo, fuentes de la organización hortofrutícola Fepex han precisado que la ayuda comunitaria para las retiradas con destino a las entidades caritativas se eleva al 100% con un límite, por cada 100 kilos, de 21 euros para naranja; 25,82 euros para mandarina; 32,38 euros para clementina y 25,56 euros para satsuma.
Desde Asaja en la Comunidad Valenciana (AVA-Asaja) han considerado «positiva» la decisión del MAPA de favorecer la retirada de 50.000 toneladas de cítricos para «descongestionar y propiciar una mejora de la coyuntura», pero reclaman «más medidas para afrontar la crisis». Han detallado que la distribución inicial del volumen de fruta previsto para su eliminación del mercado en fresco a través de esta fórmula es de 30.000 toneladas de naranjas y 20.000 de mandarinas.
El Ministerio, de acuerdo a la organización, anunció que instará a los gobiernos regionales con intereses citrícolas a desarrollar un plan encaminado a retirar de los campos los frutos que estén en el suelo o no reúnan las condiciones necesarias para su transformación, y destinar esas partidas a otros fines.
Para AVA-Asaja, «la gravedad de la crisis citrícola obliga a seguir negociando la adopción de nuevas medidas», infoma Efeagro. Esta asociación ha lamentado que el plan de retirada de fruta para zumos «no se haya puesto en marcha antes», lo que hubiera reducido la pérdida de ingresos y empleos en el sector.
Entre el 1 de mayo y el 30 de noviembre de 2018, el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) ha recibido de las OPFH solicitudes para la retirada del mercado de 51.000 toneladas de frutas y verduras. Los principales destinos para ese volumen ha sido, de acuerdo a sus datos, la distribución gratuita entre personas desfavorecidas (47 % del total) y la alimentación animal (38 %).
La cifra acumulada más abultada en ese periodo fue para las retiradas de mercado de sandía (5.300 t), seguidas de las de clementina (5.100 t); paraguaya, platerina y melocotón plano (5.000 t); nectarina (4.800 t); melocotón (4.100 millones) y tomate de invierno (3,2 millones).
Por encima de las 2.000 t también se situaron las retiradas del mercado de melón (2.900 t), caqui (2.800 t), brócoli (2.420 t) y naranja (2.400 t).