Hazera España reunió recientemente en Almería a agricultores y técnicos para mostrarles su tomate rama Sotogrande, una variedad que se encuentra en su primer año comercial y que conjuga a la perfección una buena calidad de fruto, con poscosecha y producción.
En este sentido, Juan Montes, responsable de desarrollo de tomate de la casa de semillas, nos explica que, entre las muchas cualidades de Sotogrande, es su precocidad una de las más valoradas por los agricultores. Y no es para menos. Cuando otras ramas recién acaban de entrar en producción, quienes cultivan Sotogrande ya han recolectado dos ramos y, lo que es más importante aún, esa mayor precocidad le permite aglutinar buena parte de sus kilos durante los meses de diciembre, enero y febrero, cuando, tradicionalmente, el precio del tomate es más elevado. “En Hazera buscamos que todas nuestras variedades sean rentables y con Sotogrande lo conseguimos”, nos explica Montes.
A ello añade una buena calidad de los frutos, con un color rojo intenso, muy bien dispuestos en la rama y que contrastan con el verde de esta y el de sus sépalos. Este es, precisamente, otro de los puntos fuertes de Sotogrande: su atractiva rama es muy valorada por los agricultores y comercializadores.
Su raquis es, asimismo, muy grande, evitando que los frutos se suelten, algo habitual en siembras de la segunda quincena de agosto, fecha para la que está recomendado Sotogrande. “Los tomates están muy sujetos, no se sueltan y esto facilita el manipulado de la rama, reduciéndose, incluso, las mermas de producción durante este proceso”, nos explica Montes.
Junto a todo esto, no se puede pasar por alto su buena poscosecha. Sotogrande es un tomate que pierde el agua más lentamente que otros, alargando así su vida útil. Esta última cualidad cobra aún mayor importancia si se tiene en cuenta su amplia gama de resistencias, entre las que el responsable de desarrollo de Hazera destaca su alta resistencia a virus de la cuchara y a Stemphylium, un problema fúngico provocado por el goteo de agua dentro de los invernaderos.
De todas estas características dieron buena cuenta no solo los técnicos presentes en la jornada organizada por Hazera, sino también los agricultores que ya cultivan Sotogrande. Lástima que la tan necesaria lluvia impidiera a unos y otros poder ver esta variedad en campo.