¿Qué es un mito? Un relato o historia de hechos fantásticos que forman parte de un sistema de creencias dentro de una cultura. El sector agro está lleno de mitos que difieren con la realidad. Por eso lanzamos: #RompiendoMitosAgro
¿Es cierto que el tomate ya no sabe a tomate? ¿La fruta que compramos contiene residuos que dañan nuestra salud? ¿La agricultura de antes era más respetuosa con la biodiversidad? ¿Verdad o mito? Es momento de saberlo.
Mito 1: «Lo natural SIEMPRE es beneficioso»
Falso. Según un estudio publicado en la revista de la Academia Nacional de las Ciencias de EEUU, el 99.99% de las sustancias cancerígenas que consumimos son producidas de forma natural por las plantas como mecanismo de defensa para protegerse frente a plagas y enfermedades.
¡Veamos un ejemplo! En un ensayo se probaron 52 sustancias químicas naturales en roedores en dosis altas y aproximadamente la mitad (27) resultaron ser cancerígenas. Estas 27 sustancias, están presentes de forma habitual y natural en diversos alimentos comunes.
Por tanto, se llegó a la conclusión de que el origen del producto, ya sean productos químicos naturales o sintéticos, no determina el efecto que este pueda producir -en este caso- en roedores. Lo importante es su composición. No su origen.
Fuente: PubMed
Mito 2: «La agricultura de antes era más respetuosa con la biodiversidad»
Falso. Hoy en día gracias a la tecnología aplicada a la agricultura contamos con diferentes estrategias para reducir el impacto ambiental:
Uso de fertilizantes y fitosanitarios para aumentar la productividad y necesitar menos suelo
Técnicas de riego y de cultivo que evitan la erosión
Uso de variedades más productivas y mejor adaptadas al medio
Agricultura vertical, de precisión o en cultivo hidropónico que no necesita suelo
De esta forma la agricultura moderna logra ser cada vez más respetuosa de la biodiversidad.
Mito 3: «Nuestros abuelos hacían agricultura más natural»
Falso. Nuestros abuelos hacían lo que podían pero en aquella época no existían las herramientas que tenemos en la actualidad, ni contábamos con el control ambiental que existe hoy en día.
Muchos de los insecticidas y herbicidas que se utilizaban hace 50 o 100 años ahora están prohibidos porque no pasarían ningún control de salud o ambiental. Los sistemas de riego eran menos eficientes, se perdía mucha agua y las variedades eran menos productivas.
A efectos prácticos, con el mismo trabajo, conseguían mucha menos producción con el mismo suelo, afectando a su vez al medio ambiente. En este sentido, hoy la producción agrícola es mucho más respetuosa que antaño. Pretender alimentar a la población del siglo XXI con agricultura del siglo XIX, supondría arrasar con todos los bosques del planeta y que mucha gente pasara hambre.
Fuente: BASF Agro España