Plantas de tomate resistentes a la mosca blanca
Científicos del IHSM consiguen una línea con tricomas capaz de proteger a las tomateras de plagas como la del rizado amarillo de la hoja
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La mosca blanca ‘Bemisia tabaci’ es posiblemente la mayor pesadilla de los productores de tomate, uno de los cultivos con una mayor distribución geográfica a nivel mundial y una gran diversidad en cuanto a modos de producción (aire libre, abrigos, invernaderos.). En España, Almería es la provincia que más destaca. Un tercio de sus invernaderos se dedican a este cultivo. En la campaña 2015-16 alcanzó una producción récord de 1.101,9 millones de kilos.
El valor de la producción andaluza de tomate superó en la temporada 2014-2015 los 760 millones de euros. En la provincia de Málaga el cultivo ocupa una superficie de un millar de hectáreas con una facturación anual de unos 41 millones de euros , lo que sitúa al tomate en el primer lugar del ranking de las hortícolas que produce el campo malagueño, seguida a bastante distancia por el pimiento (500 hectáreas y unos 20 millones de facturación en 2016). Ello da una idea de la gran importancia que el cultivo tienen para la economía andaluza.
Por esta razón, la incidencia de la mosca blanca es algo que preocupa bastante al sector hortícola. La ‘Bemisia tabaci’ es transmisora de varias de las enfermedades víricas que provocan grandes pérdidas, como son el amarilleo del tomate, o el rizado amarillo de la hoja de tomate. Además existen limitaciones en cuanto al uso de productos químicos para combatir esta plaga. De hecho, la tendencia es ofrecer tomates libres de fitosanitarios.
El Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea (IHSM) ‘La Mayora’, integrado por la Universidad de Málaga y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), lleva años trabajando en la búsqueda de variedades resistentes de tomates a la mosca blanca, que transmite el virus de la cuchara. Una de las líneas de investigación se basa en el uso de variedades silvestres de tomates capaces de repeler plagas producidas por insectos y ácaros.
Una de esas variedades silvestres, emparentada con el tomate y mucho más resistentes a los insectos, es la ‘Solanum pimpinellifolium’, que posee en las hojas y tallos un tipo de pelo minúsculo -tricomas glandulares- con una glándula que produce de forma natural sustancias químicas con propiedades insecticidas. En sus tricomas glandulares producen acilsacarosas, sustancia que le confiere resistencia a plagas como araña roja, pulgones y moscas blancas. Este tipo especial de pelo glandular no existe en la especie cultivada. Sin embargo, mediante varios ciclos de cruzamiento y selección sucesivos, el grupo de Mejora Genética del IHSM La Mayora obtuvo en su día una línea de tomate cultivado con tricomas de tipo IV y producción suficiente de acilsacarosas como para proteger sus plantas frente a la mosca blanca y al principal virus (TYLCV) causante de la enfermedad del rizado amarillo de la hoja que la mosca blanca transmite.
Problema
El problema que planteaba era que en estadios de planta joven recién salida de semillero la producción de acilsacarosas es aún escasa e insuficiente para una protección completa frente a la transmisión del devastador virus TYLCV (rizado amarillo del tomate).
En un reciente trabajo publicado en la revista Frontiers in Plan Science, que formó parte del trabajo de tesis doctoral de Rocío Escobar-Bravo, realizado en colaboración de los grupos de Mejora y de Virología del IHSM La Mayora e investigadores del IBMCP UPV-CSIC de Valencia y del IBED-Universidad de Amsterdam, se informa sobre la investigación llevada a cabo para adelantar la producción de acilsacarosas mediante la inducción temprana de defensa de la planta mediada por la hormona vegetal ácido jasmónico. En los ensayos se consiguió aumentar la densidad de tricomas glandulares de las plántulas, de modo que las plantas jóvenes fortalecidas eran capaces de reducir a niveles muy aceptables las infecciones del virus TYLCV transmitido por la mosca blanca, según La Mayora.
Estas investigaciones apuntan a que se pueda contar en el futuro con variedades comerciales de tomate mejoradas para estos caracteres en las que sea posible reducir al mínimo las aplicaciones de plaguicidas.
En los estudios que lleva a cabo La Mayora en esta línea, que hace tiempo que han despertado el interés del sector productor almeriense, participan entre otros científicos Rafael Fernández, Enrique Moriones, Juan Manuel Alba, Clara Pons, Antonio Granell, Merijn R. Kant, y Rocío Escobar.
Fuente. www.diariosur.es
Combatir la mosca blanca en el huerto ecológico http://bit.ly/2kSt6k6