Los gobiernos regionales de las zonas productoras han hecho ya sus cálculos de inicio de campaña, con unas previsiones totales de naranja, mandarina, limón y pomelo de 3,89 millones de toneladas (+33,9%) en la Comunidad Valenciana, 2,21 millones de Tm (+2,5%) en Andalucía y 963.375 Tm (+13,8%), en la Región de Murcia.
El Ministerio de Agricultura, en su último Avance de Producciones —con datos hasta el 31 de agosto— daba para toda España un volumen de 3,71 millones de toneladas de naranja y 1,092 millones de toneladas de limón, lo que representa un 10,4% y un 17,7% más que en la campaña 2017/18.
Las dos interprofesionales del sector, Intercitrus (naranja y mandarina) y Ailimpo (limón y pomelo) coinciden con las previsiones regionales y se muestran optimistas ante las posibilidades que supone contar con más producto.
El director de Ailimpo, José Antonio García, señala que, en una “buena campaña en producción y calidad”, el sector del limón ha pedido al MAPA que transmita a Bruselas la necesidad de vigilar la entrada y los controles de pesticidas de las partidas procedentes de Turquía, donde este año hay más volumen. De acuerdo a sus estimaciones, la producción de pomelo será similar a la de 2017 (76.000 toneladas) y habrá un volumen récord de limón de 1,3 millones de toneladas, +29% respecto a la temporada 2017/18 y un +36% frente al promedio de las últimas diez campañas (951.385 toneladas).
Para el presidente de la Interprofesional Citrícola Española (Intercitrus), Rafael Cervera, “esta campaña puede ser ideal para batir récords en la exportación, en la venta a la industria del zumo y en consumo interior”. A su juicio, tras el comienzo con partidas de mandarina de poco calibre, “es necesario buscar un equilibrio entre oferta y demanda”.
Para lograrlo, el sector ya está utilizando una de las herramientas comunitarias previstas para la gestión de situaciones de crisis: las retiradas de fruta del mercado, unas partidas que se dirigen, principalmente, a su distribución gratuita por los bancos de alimentos o a su uso como alimento ganadero.
El Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) ha recibido solo durante la primera quincena del mes de octubre solicitudes de retirada de 1,04 millones de kilos de cítricos (733.800 kilos de satsuma, 287.100 kilos de clementina, 18.000 kilos de limón y 1.800 kilos de naranja) desde las organizaciones de productores de frutas y hortalizas (OPFH).
La campaña ha arrancado en la Comunidad Valenciana con cierto retraso. El presidente de Intercitrus señala que lo que no se debe hacer es recoger la fruta del árbol “en verde”. Para Cervera, es un buen momento para que la industria transformadora “refuerce su posición como suministradora de zumo de la Unión Europea” y apueste por la producción nacional en vez por el concentrado importado de Brasil. Y también para alcanzar o incluso superar los niveles de exportación de la temporada 2014/2015 (4,15 millones de toneladas). “Si lo trabajamos, se puede conseguir”, insiste Cervera, tras remarcar la buena marcha de las ventas en mercados como Canadá, donde los cítricos fueron el 70% de las exportaciones frutícolas españolas en 2017, por 39,17 millones de euros, según el ICEX. El Brexit y, sobre todo, la entrada a la Unión Europea de cítricos de países terceros que no cumplen la normativa comunitaria en sanidad vegetal y residuos de pesticidas, son otros de los problemas para el sector.
Desde Cooperativas Agro-alimentarias, el técnico Enrique Bellés prevé que a partir de ahora la campaña se va a enderezar porque ya han empezado a salir variedades buenas y de calidad, a lo que hay que sumar la llegada del frío en la UE, un factor que condiciona el consumo de esta fruta por su vitamina C.
Fuente: Valencia Fruits