En el sector de la patata en Castilla y León coinciden en calificar de catastrófica la situación de la campaña. Mucha oferta en toda Europa y poco escalonamiento en la cosecha han producido que los precios en origen sean más bajos que en 2014. El presidente de la Asociación Nacional de Almacenistas de Patata (Asonal), José Ramón Aguado, ha asegurado que la campaña de patata de Castilla y León, la principal comunidad productora, será “muy corta, porque finalizará en octubre” y habrá “producto que quedará sin recoger“.
Aguado, que además es presidente del Foro Nacional de la Patata y de la sectorial este producto en la organización Fepex, ha explicado que no espera que quede en el campo tanto como en 2014 —150.000 toneladas, según sus cálculos—, pero sí que “no habrá tiempo para comercializar todo porque el mercado ya se está yendo a Francia”. A su juicio, esta campaña está siendo “desastrosa” tras el “año récord” registrado en producción y precios durante 2016.
A diferencia de la pasada temporada —que finalizó en el mes de diciembre— ahora «el mercado europeo está congestionado con tanta patata», según Aguado, quien ha calculado que en toda Europa se ha plantado un 4,5% más de hectáreas de este tubérculo.
Para José Ramón Aguado sería urgente que todo el sector se comprometa de una vez a sacar adelante la interprofesional regional para poder acceder a fondos comunitarios y promocionar con ellos este producto. “Hay que conseguir que el consumidor la elija por su calidad, ya que es mucho mejor que otras importadas, de piel más clara”, ha puesto como ejemplo.
La presidenta de la legalmente constituida pero aún no operativa Interprofesional de la patata de Castilla y León, Yolanda Medina, ha confirmado que la representación de la producción en esta organización se acerca al 40%, aunque es “optimista” en que aumente al 51% necesario para que la entidad funcione.
El presidente de la Asociación de Operadores de Patata de Origen de Castilla y León (Asopocyl), Marcos Martín, ha explicado que la campaña de patata en Castilla y León, que se encuentra en su ecuador, está en una situación “catastrófica”, ya que los precios se han hundido por debajo de los de 2014 debido a que “se han solapado cosechas” y ha habido “poco escalonamiento” de la producción por la climatología.
El dirigente ha detallado, que mientras en las zonas productoras de Segovia se está cargando patata “a precios decentes”, “en otros lados su precio no sube de los cinco o seis céntimos/kg”.
Un precio digno
El responsable sectorial de la patata de la organización agraria COAG, Alberto Duque, ha coincidido con Martín en utilizar el adjetivo de “catastrófica” para describir la situación para el productor, a la vez que sitúa en entre 20 y 22 céntimos/kg el “precio digno, por encima de los costes de producción“, para la patata de lavado de primera.
Según los últimos precios medios nacionales que difunde periódicamente el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), la cotización de la patata en la semana 36 (del 4 al 10 de septiembre de 2017) se situó en 9,28 céntimos/kg, un 17,64% por debajo de la semana anterior. En la semana 36 de 2016, la patata se pagaba en origen a 31,68 euros/100 kg; en la de 2015, a 18,2 euros/100 kg y en la de 2014, a 11,48 euros/100 kg.
Para Martín la solución para la concentración de oferta no es “guardar la patata”, ya que “en media España se está empezando a cargar patata de Francia, que compite directamente con la producida en Castilla y León.
El responsable del sector de la patata de COAG, además de la sobreoferta por la entrada antes de tiempo de producto desde Francia, “que suele venir en noviembre”, considera que el mercado “está abarrotado” porque este año se han perdido los contratos con los exportadores alemanes.
“Hay partidas de patatas que no son comercialmente atractivas en España porque son más pequeñas pero sí en Alemania, a lo que hay que sumar que en Castilla y León arrancó la campaña con las cámaras de los almacenes llenas en Andalucía“, ha explicado Duque.
Fuente: valenciafruits.com