«En el marco de Mercosur, España apoya la conclusión del acuerdo, evidentemente con un contenido equilibrado», dijo Planas a su llegada al Consejo de Agricultura y Pesca que se celebra en Bruselas.
El ministro precisó que ese equilibrio existe «desde el punto de vista agroalimentario y teniendo en cuenta también todo lo que se refiere a los aspectos que hemos defendido en materia de política comercial, aspectos medioambientales, pero también de producción agroalimentaria. En relación con las cláusulas espejo y demás elementos que son absolutamente fundamentales».
Teniendo en cuenta todos esos aspectos, a Planas le resulta «un poco chocante» las reservas de algunos países, como Austria, al acuerdo y de las cuales tendrá ocasión de tratar en una reunión bilateral con su homólogo austriaco en los margenes del Consejo.
Los ministros de Agricultura y Pesca de la UE examinarán este lunes en Bruselas el estado de los acuerdos comerciales, en un momento difícil para el campo por los costes pero con datos que prueban que los exportadores agroalimentarios mantienen sus ventas.
El acuerdo suscrito en 2019 entre la UE y Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) protagoniza la agenda comercial de 2023, con el interés especial de España para que se cierre durante su presidencia de la UE, en el segundo semestre.
Para el Consejo agrícola de este lunes, Austria -uno de los países con más reservas hacia Mercosur- ha presentado un documento para discusión en el que expone los «efectos negativos del pacto» en la competitividad agrícola y sus «carencias» frente a los esfuerzos exigidos a los productores de la UE.
Austria ha argumentado que los controles alimentarios o de bienestar animal en el bloque suramericano son menos frecuentes y que sus costes de producción de aves, azúcar o de terneros son «un 50 % inferiores a los de la UE», además de plantear nuevas normas sobre etiquetado o incluso cláusulas de salvaguardia.
La fecha de ratificación del compromiso con Mercosur está en el aire, pues debe ser aprobado por los Gobiernos comunitarios y por sus parlamentos; España tiene mucho interés político en que se complete y Francia encabeza el grupo de naciones reticentes.
La UE también mantiene negociaciones comerciales con Australia, Nueva Zelanda, Chile o México.