Tras un proceso que ha durado más de dos años, las nuevas normas UNE de insumos para la agricultura ecológica por fin ven la luz. Su objetivo principal es unificar los criterios y requisitos que deben cumplir los insumos utilizados en agricultura ecológica, teniendo en cuenta toda la legislación que afecta a estos productos: la comunitaria en cuanto a producción ecológica y la que rige sobre los insumos en general. Las normas han sido desarrolladas por grupos de trabajo impulsados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) y han contado con la participación y el consenso de la Administración central y las autonómicas, la entidad Nacional de Acreditación (ENAC), la Mesa de Coordinación de la Producción Ecológica (MECOECO), las asociaciones del sector AEFA, AEPLA, ANFFE, IBMA, AEFISA, FOMA, AFIECO y empresas especializadas en la certificación ecológica como el Servicio de Certificación CAAE.
El resultado ha sido aplaudido por el sector, que desde ahora dispondrá de las garantías adicionales que añaden estas tres normas, cada una de ellas destinada a regular la actividad de los principales actores -fabricantes, comercializadores y certificadores – del sector de los insumos utilizables en la producción vegetal ecológica: la Norma UNE 142500, sobre Insumos utilizables en la producción vegetal ecológica. Fertilizantes, enmiendas y sustratos de cultivo; la Norma UNE 315500 sobre Insumos utilizables en la producción vegetal ecológica. Productos para la gestión de plagas y enfermedades; y la Norma UNE 66500 Requisitos mínimos para la certificación de insumos utilizables en producción vegetal ecológica según UNE 142500 y UNE 315500.
Regular todos los aspectos ligados a los insumos “implica coherencia y garantía de cara a todo el proceso de producción ecológica de un producto, ya que cualquier irregularidad relacionada con el uso de fertilizantes o fitosanitarios usados en una finca podría derivar en importantes perjuicios para el agricultor”, explica Álvaro Barrera, presidente de Servicio de Certificación CAAE. “Además -concluye-, todas las garantías adheridas al sistema productivo se traducen en garantías también para el consumidor final y, por supuesto, en ventajas para los productores nacionales de insumos, que con estas normas podrán mostrarse al mercado internacional con un valor añadido extra que, sin duda les abrirán muchas puertas”.