UPA-UCE Extremadura alerta de que los productores de tomate sufrirán perdidas muy graves en esta campaña debido a los precios ruinosos que han impuesto las industrias y la fuerte caída de la producción por la climatología. “Los agricultores no podrán cubrir costes y, por tanto, muchas explotaciones quedarán en una situación límite ya que los precios llevan congelados varios años consecutivos”, lamenta el secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas.
Este cultivo ha vivido dos momentos clave este año. En primer lugar, la campaña de siembra se vio muy afectada por las fuertes lluvias, que provocaron un retraso en la plantación de variedades tempranas haciendo imposible la siembra de una parte importante del tomate temprano.
Posteriormente, las diferentes olas de calor de este verano han perjudicado el cuaje del fruto, además de asolanar el tomate. Todo ello ha provocado una reducción de las variedades más tardías, situándose entre 55.000 y 60.000 kg/H, lo que implica una reducción de más del 30% de la contratada.
Por todo ello, desde UPA-UCE tenemos que denunciar que muchos agricultores van a quedar arruinados por producir a unos precios que no cubren sus costes, mientras las industrias del tomate van a ganar más dinero que nunca porque están vendiendo la producción a buen precio.
“Ya hemos reclamado que una parte de sus beneficios repercuta en una subida de precios para los agricultores. A las industrias tenemos que decirles que o modifican al alza los precios recogidos en los contratos o les denunciaremos ante la AICA por incumplir la Ley de la Cadena”, mantiene Huertas.
Además, UPA-UCE reclama a las administraciones que se impliquen en este grave problema para que, a través de los seguros agrarios, se pueda indemnizar a los agricultores porque “no se puede permitir que un sector que asegura el 100% de su cosecha se vea desamparado”.
UPA-UCE solicitará reunirse con la consejería de agricultura y con la sectorial de tomate de Cooperativas Agroalimentarias para tratar de llegar a un “planteamiento conjunto” ante esta situación que está poniendo en grave riesgo a una gran parte del sector productor de tomate extremeño.