El segundo aforo de cítricos para la campaña 2016/2017 de la Comunitat Valenciana sitúa la cosecha en 3.885.539 toneladas, lo que supone un incremento del 21,5% más que la del año anterior. Esta segunda estimación de la campaña ha sido realizada por el Servicio de Documentación y Estadística de la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.
El aforo citrícola que se presentó en septiembre de 2016 preveía , en general, una mayor cosecha de fruta que la campaña anterior, con una recuperación de los producción en relación a cosechas previas, esperándose una campaña normal en cuanto a rendimientos.
Estas estimaciones, que se realizan en agosto, son revisadas en el segundo aforo de cítricos con datos de las visitas posteriores a campo que se realizan entre finales de octubre y principios de febrero, fechas más próximas a la recolección, con el fin de corregir desviaciones en las estimaciones de cosecha en las variedades más tardías.
Estas cifras, sin embargo, no recogen las cantidades no comercializadas de cosecha habidas hasta el momento, ya sea por no alcanzar un determinado calibre o sufrir daños por los temporales de finales de 2016 y principios de 2017. La fruta no comercializada se estima en unas 640.000 toneladas (en torno al 16% de la cosecha prevista).
Las primeras previsiones estaban hechas sobre un inicio de campaña donde la floración había sido normal, aunque la falta de lluvias y las temperaturas elevadas, unido al mayor espaciado entre riegos, que se produjo en algunas zonas, provocó la necesidad de realizar varios aclareos para facilitar el engorde de la fruta en el árbol.
En este sentido, los más importantes se dieron en satsumas, clementinas tempranas y en navelinas, lo que provocó que se redujeran las estimaciones iniciales de cosecha en el conjunto de la la Comunitat Valenciana, pero posteriores visitas al campo, han revelado que las lluvias puntuales del pasado mes de octubre mejoraron el calibre de la fruta y elevaron en general las previsiones de cosecha de las variedades de media estación y tardías.
De esta manera, este segundo aforo de cítricos recoge incrementos de cosecha en relación a la primera estimación en todos los híbridos con la excepción de la Clemenvilla, en Clementinas de media temporada, con la salvedad de la Clemenules, y en Hernandinas, así como en Naranjas late y Valencia late.