Los cuatro condicionantes son:
1. Cambio climático
2. Inflación
3. Menor demanda
4. Mayor necesidad de política de apoyo al sector.
En este especial de ecológico que incluimos en esta edición, los operadores que entrevistamos coinciden en la necesidad de alcanzar un equilibrio entre la oferta y la demanda. El problema es que el objetivo europeo de alcanzar un 25% de la superficie agrícola en bio para 2030 no se corresponde con el nivel de consumo, y menos en estos tiempos de dificultad económica, una realidad que merma la rentabilidad y viabilidad del sector. Para entender su situación, abordaremos los 4 condicionantes que influyen actualmente sobre el sector negativamente:
1. Cambio climático
La escasez de agua, las temperaturas extremas y los episodios climáticos adversos, unido a la proliferación de plagas y virus, complican el desarrollo de los cultivos, tanto ecológicos como convencionales, reduciendo su oferta. Es lo que ha sucedido en esta pasada campaña, en la que, a pesar de que esto ha alterado la programación con los clientes, como explica María José Miquel, responsable comercial de producto ecológico en Anecoop, los productores han podido, finalmente, suministrarles. Esto se ha debido a dos motivos, según sostienen sus operadores. Por un lado, a que “el cultivo ecológico se ve menos afectado por las condiciones climáticas ya que uno de sus fuertes es tener en cuenta el medio natural”, como señala Francisco Javier del Águila, gerente de Keops Agro. Por otro, la menor demanda ha permitido que puedan proveer a sus clientes, según sostiene el gerente de Bioprocam, Fernando Martín, quien plantea: “Nos preocupa qué sucederá esta temporada si se recuperan los volúmenes de producción”.
Mientras tanto, el desarrollo de nuevas variedades de cultivo adaptadas al cambio climático se plantea como una necesidad, como ya están trabajando casas de semillas como Bejo.
2. Inflación
El incremento de los costes de producción que ha disparado el precio de insumos y recursos para el sector agrícola se ha visto reflejado también en el producto ecológico. El precio del convencional se ha puesto al mismo nivel que el ecológico en la mayoría de referencias de frescos en el lineal hasta el punto de que la diferencia se ha reducido considerablemente, por lo que los márgenes han mermado y el productor se encuentra en una situación de escasa rentabilidad, “haciéndole vivir su peor momento en la historia”, indica Martín.
«El BIO está viviendo el peor momento de su historia, señalan en Bioprocam»
3. Menor demanda
La inflación en la cesta de la compra está provocando un retraimiento del consumo, especialmente en artículos de mayor precio, así como una tendencia del consumidor hacia el ahorro. En este contexto, el producto ecológico es uno de los más perjudicados y “está experimentando una desaceleración en el crecimiento del consumo en comparación con años anteriores”, detalla Feliu Cusido, responsable de Ecológico en Bejo. Además, la falta de rentabilidad de sus agricultores incidirá en una reducción de la superficie y por tanto de la oferta que inevitablemente acentuará la inflación, con consecuencias en el consumo. Jesús Montoya Sánchez, gerente de Campojoyma, sostiene al respecto: “Ser una empresa ecológica no puede considerarse algo coyuntural en función de la oferta y demanda, la sostenibilidad es un compromiso de todos”.
4. Mayor necesidad de políticas de apoyo
Como solución a toda esta coyuntura, desde el sector coinciden en que es necesario un mayor apoyo por parte de la Administración con políticas que faciliten o incentiven la labor entre los productores de ecológico y campañas de promoción para el fomento del consumo. “Las instituciones deben promover el consumo de productos ecológicos en lugar de forzar el cultivo, ya que el equilibrio es fundamental”, apunta Adolfo García, gerente de Camposeven. De la misma forma, desde Toñifruit consideran que ese 25% que debe crecer la superficie bio, debe también trasladarse en el mismo porcentaje al nivel de consumo. Pese a todo, sigue siendo un sector que aporta bondades sobre la salud, el medio ambiente y la sociedad, mirando por la sostenibilidad en todos sus ámbitos y debe, como apuntan desde La Paz Fresh, “seguir manteniendo el liderazgo con un modelo de negocio más sostenible que inspire cambios positivos”.
