La compañía, que desembarcó en la península en el año 1994 con la apertura de una primera tienda en la ciudad de Lleida, cuenta actualmente con más de 525 establecimientos y cerca de 9.600 trabajadores en España.
La cadena, además, prevé incorporar este año a 400 nuevos empleados, la mitad de ellos por la puesta en marcha del almacén murciano, lo que situará la plantilla española de la compañía por encima de los 10.000 trabajadores, según ha explicado hoy el director financiero de Lidl España, Ferran Figueras.
«Estamos muy satisfechos de nuestra evolución en el país», ha subrayado Figueras en un encuentro con medios que ha mantenido con motivo del evento que ha organizado la cadena en el Fórum de Barcelona para celebrar sus dos décadas en España.
Figueras ha comentado que la puesta en marcha del centro logístico de Lorquín supondrá una inversión de unos 35 millones de euros, que convertirán a esta plataforma en un almacén de «última generación», el más moderno de la cadena y el modelo a seguir.
«Tras esta apertura vendrán más, pero aún no hemos decidido dónde. Probablemente Madrid tendrá su segundo centro logístico. Todo dependerá de la evolución de nuestras tiendas», ha indicado el directivo, que cree que Lidl tiene capacidad para llegar a los 800 establecimientos en los próximos años.
Las otras plataformas logísticas de Lidl están situadas en las ciudades de Montcada i Reixac (Barcelona), sede también de sus oficinas centrales, en Riba-roja del Turia (Valencia), Llodio (Álava), Pinto (Madrid), Málaga, Dos Hermanas (Sevilla), Narón (A Coruña) y Güimar (Santa Cruz de Tenerife).
Desde que Lidl inició su actividad en España, sus establecimientos han ido evolucionando, tanto en cuanto a imagen de tiendas como de surtido, modernizándose y adaptándose a las nuevas necesidades de los consumidores.
Así, si en el año 1994 su surtido era «muy acotado», formado por unas 700 referencias, en 1997 los lineales de Lidl incorporaron fruta y verdura, en el año 2000 los congelados, en 2005 la carne y la panadería y ya en 2012 la sección de pescado fresco envasado.
El director general de Compras de Lidl España, Miguel Paradela, ha resaltado que sólo en el último año el número de referencias de frescos ha aumentado en más de un 40 %, ya que este tipo de producto se ha convertido en «clave» en la cesta de compra del consumidor.
Además de los frescos, ha agregado, Lidl apuesta por los productos nacionales, hasta el punto que más del 60 % de las referencias del surtido actual de la cadena en España son suministradas por 445 proveedores españoles, frente a los 368 del año anterior.
Las compras de Lidl a proveedores españoles supusieron en 2013 unos 3.000 millones de euros, un 20 % más que en 2012, y buena parte de ellos tuvieron como destino los cerca de 10.000 establecimientos que tiene la cadena en 26 países europeos.