Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, tras analizar los datos del último informe mensual de comercio exterior disponible, con datos de enero a octubre, resalta la importancia del sector agroalimentario como básico en el comercio exterior y la economía española, pese a que todo esto no se ha trasladado en la renta de los agricultores y ganaderos debido a los bajos precios de los productos.
La organización pone en valor que el sector agroalimentario no solo no ha reducido exportaciones desde enero a octubre de este año, donde se puede esperar que se produjeran las mayores caídas del año en el comercio exterior a causa de la pandemia, sino que se han incrementado un 5,4% respecto al mismo periodo de 2019.
Mientras tanto, según revela el estudio, el conjunto de sectores económicos ha visto caer las exportaciones un 11,9% y las importaciones un 16,7% de su valor respecto a los diez primeros meses de 2019. De esta forma, el sector agroalimentario (alimentación, bebidas y tabaco) se sitúa durante este periodo de 2020 como el primer sector exportador, con casi el 20% del total de exportaciones.
Unión de Uniones considera que este informe pone de manifiesto la importancia que tiene el sector agroalimentario español en el comercio exterior nacional. Además, que sea de los pocos que en un contexto de pandemia y crisis económica crece, demuestra su carácter esencial para la economía, con un saldo comercial positivo en estos meses de 14.025 millones de euros. «Nuevamente se pone de relieve el papel que hemos jugado los agricultores y ganaderos en esta crisis. pero falta que se nos reconozca pagándonos unos precios que compensen nuestro trabajo y en esa lucha estamos», señalan desde la organización.
Distinta coyuntura por sectores
El subsector de los productos cárnicos es el que más positivamente ha contribuido a impulsar las exportaciones españolas, ya que ha incrementado sus exportaciones en un 18,2% respecto a enero-octubre de 2019, principalmente gracias al fuerte crecimiento de China como destino de las exportaciones de carne de cerdo. Las frutas, hortalizas y legumbres también han aumentado un 7%; el azúcar, café y cacao en un 3,4%; los lácteos y huevos en un 1,3% y otros alimentos en un 5,3%.
En cuanto a las importaciones caen en todos los subsectores agroalimentarios a excepción de frutas y hortalizas, que sube un 4,1% y aceites y grasas, cuyas importaciones han aumentado un 23,9%.
Al caer más las importaciones que las exportaciones en términos de saldo comercial todos los sectores agroalimentarios incrementan su saldo comercial. De forma general el saldo comercial del sector agroalimentario crece un 35,8%, situándose para este periodo en los 14.025 millones de euros.
Sin embargo, la organización muestra su preocupación por el sector de los aceites, dominado por el aceite de oliva. Este sector ha bajado sus exportaciones un 0,5%, mientras que las importaciones, según los datos del informe, han crecido casi un 24, por lo que su saldo comercial baja un 34%.
Según los datos de Datacomex, el incremento en las importaciones en este subsector es tanto de aceite de girasol, que viene creciendo desde 2018, como de aceite de oliva, que se está importando en un valor ligeramente inferior al de 2018 cuando se alcanzaron las mayores importaciones de los últimos cinco años.
En este sentido Unión de Uniones ya denunció el aumento de las importaciones masivas de aceite y las consecuencias que puede tener para el sector e insiste en compromisos sectoriales para no saturar el mercado con importaciones masivas.