“Las aclaraciones de Marruecos son falsas y desafortunadas”
Coexphal y COAG Almería responden en la Revista Mercados a las declaraciones en las que Marruecos afirma que sus exportaciones no perjudican a las del sector hortofrutícola europeo. Según Andrés Góngora de COAG Almería, ya representan el 10% a nivel europeo.
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Ya hay un nuevo capítulo en el “conflicto” de España con Marruecos relacionado con el sector hortofrutícola de ambos países y en concreto con el aumento de exportaciones del país marroquí a la Unión Europea. Tras la publicación de varios artículos en medios de comunicación digitales a nivel nacional en los últimos días, denunciando que el crecimiento de exportaciones de productos agrícolas como sandía o tomate de Marruecos está causando graves estragos a los productores europeos y sobre todo españoles, Marruecos a través de COMADER, la Confederación Marroquí de Agricultura y Desarrollo Rural, envió un comunicado de prensa el viernes para defenderse de estas acusaciones afirmando que sus exportaciones “no desestabilizan el mercado europeo” y que “sus exportaciones de frutas y hortalizas sólo representan 2% del mercado”, afirmando que con este tanto por ciento “no perjudican” a la producción de frutas y hortalizas europeas.
Revista Mercados ha querido conocer la valoración de dos organizaciones que están trabajando activamente para luchar contra la competencia desleal con el país del norte de África, COEXPHAL y COAG Almería. “Nos parece una aclaración desafortunada”, responde Luis Miguel Fernández, gerente de COEXPHAL, impulsores de la campaña de concienciación #OrigenMarruecos y con la que se pretende enseñar a consumidores y supermercados sobre cómo diferenciar producto nacional y de origen marroquí. “No solo se están viendo afectadas las exportaciones españolas de tomate, si no que en cultivos como la sandía, hemos visto en la campaña de primavera como se ha producido un gran descenso en favor de la de Marruecos”.
Por parte de COAG Almería van más allá y en boca de su responsable, Andrés Góngora, afirman que los datos aportados por Marruecos “son falsos” y tal y como recoge el ‘Informe anual de la Comisión Europea sobre la producción y comercialización de tomate en Europa’(**), “ese 2% lo extraen de la cifra global de importación de tomate en Europa en el que se incluyen los procesados, por lo que los datos se calculan sobre una cifra más elevada y las exportaciones que ellos hacen es de producto fresco”, confirma. Según la asociación almeriense, “sus exportaciones suponen el 10% de la producción europea”, afirman.
*Toneladas de tomate que entran a la Unión Europea de Marruecos y terceros países
*Los tomates que la Unión Europea vende fuera de Europa y los que compra. El descenso de 2014 en ventas fue debido al veto ruso.
Ambos coinciden en que esta circunstancia no es nueva y viene sucediendo desde hace más de 20 años. En el acuerdo de la Unión Europea con Marruecos, recoge que la horquilla de comercialización es desde el 15 de octubre hasta finales del mes de abril. “Los más afectados son España e Italia”, confirman ya que “Francia, Bélgica y Holanda, protegen y salvaguardan su tomate y no les coincide en fechas”.
Controles fitosanitarios y producción más barata
Una vez más sale a relucir la falta de controles fitosanitarios por parte de la Administración europea a los productos marroquís. “Salimos a alerta sanitaria por semana por culpa de productos marroquíes”, afirman desde Coexphal. Marruecos se rige por CODEX Alimentarius, que permite muchos más químicos que las normas de la UE, mientras que en España se está intentando “reducir la lucha química por la biológica” para adaptarse a las exigencias europeas, algo que aumenta los costes de forma considerable.
Otro de los problemas que hace al producto español menos competitivo, es la diferencia de costes salariales, “Marruecos paga 8 euros el día a sus trabajadores, en España pagamos 7,28 euros la hora”, los costes se elevan 8 veces entre uno y el otro, repercutiendo lógicamente, en el precio del producto.
Única solución: concienciar al consumidor
Muchos productores están apostando por mover el calendario de producción ya que “nos están machacando el invierno”, según Góngora. “Empezamos a coger los primeros tomates en septiembre y alargamos las campañas hasta junio”, explica, y aunque se consigue un tomate de calidad, “es complejo cultivar el tomate en verano en ciertas zonas de España debido al alto consumo de agua que se necesita”, y que causa sequía, desabastecimiento y otro aumento en el coste de producción.
Por ello, visto el contexto, estas y otras organizaciones solo ven la solución en la concienciación del consumidor, los supermercados y la sociedad del consumo de producto nacional, frente al marroquí. “Dada la inactividad de las instituciones nacionales y europeas”, por lo que iniciativas como la mencionada de #OrigenMarruecos van a ser cada vez más frecuentes. “Hemos invitado a FEPEX y a las cooperativas agroalimentarias a qué se unan”, afirman desde COEXPHAL y el próximo 9 de julio, coincidiendo con el día de las cooperativas, van a presentar los resultados.
Seguiremos pendientes de cómo evoluciona esta situación y de si las administraciones deciden tomar de una vez cartas en el asunto.
