La fresa, 5 razones para tomarla
Pensar en la fresa es imaginar platos llenos de color, sabor y aroma. En batidos, en postres, frescas… La fresa es de esa clase de frutas que está deliciosa de cualquier forma que se ingiera, pero si necesitas más motivos para consumirlas, desde la campaña Fresas de Europa te presentamos cinco buenas razones con las que caerás rendido al fruto carmesí, si es que aún no te ha conquistado.
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1ª Razón: por su composición nutricional
La fresa es una fuente natural de fibra, fuente de vitamina C y rica en polifenoless. 100 gramos de fresas proporcionan un 75% de la ingesta diaria de referencia para vitamina C. Además, la fibra contribuye al funcionamiento normal del intestino. La vitamina C y los polifenoles contribuyen a la protección de las células frente al daño oxidativo.
2ª Razón: por su versatilidad en la cocina
Como postre, como guarnición, en ensalada, batidos, zumos o helados. Sea cual sea la forma de preparación, esta fruta ofrece multitud de posibilidades culinarias y marida a la perfección tanto en platos calientes como fríos.
Pese a las múltiples combinaciones que presenta, las fresas son de los pocos alimentos que conservan su naturalidad. Las consumimos en estado natural, frescas, tal y como las recolectamos del campo, de modo que mantienen intactas todas sus propiedades nutricionales. Las fresas potencian un amplio potencial en la cocina en cuanto a colorido, sabor y textura, siendo el ingrediente perfecto para elaborar platos atractivos, sabrosos y naturales de los que disfrutar con poco esfuerzo.
3ª Razón: por su sabor
El sabor de la fresa es tan agradable al gusto que sirve constantemente como fuente de inspiración para la elaboración de multitud de productos: pasta dentífrica, enjuagues bucales, jarabes y medicamentos infantiles, chicles y gominolas. También su aroma es tan reconocible que el universo de la cosmética se ha inspirado en ellas para elaborar colonias, pintalabios, vaselinas, geles y cremas, tanto faciales como corporales.
4ª Razón: una fruta festiva
Por su forma, su color y su sabor, esta fruta se ha asociado tradicionalmente a momentos de placer, de relax o de celebración, y a atributos como el romanticismo, la exquisitez o la pasión. Todo ello ha hecho posible que las fresas se hayan ganado un lugar privilegiado en la cultura mediterránea y europea, estando presentes en muchos de los momentos especiales de la vida y facilitando la cultura de vivir para disfrutar.
5ª Razón: listas para consumir a cualquier hora
Para desayunar, como snack, en el postre, en la merienda o en la cena. Da igual el momento en el que nos encontremos, las fresas son un ingrediente que sabe bien a cualquier hora del día y en cualquier situación. Bien solas o acompañadas, las fresas permiten crear multitud de combinaciones o comerlas de forma natural, tal y como se recolectan del campo.
