Ramiro Arnedo está desarrollando en variedades de pepino para ofrecer soluciones de alta calidad y resistencias adecuadas a todos los ciclos de cultivo. Para la próxima campaña, seguirán comercializando las variedades Bastian F1 y Dogo F1 para el ciclo temprano y primavera tardía, y Flavius F1 para el ciclo medio y primavera temprana.
En cuanto a la situación actual del cultivo del pepino, se espera que Holanda compita de nuevo este año. A pesar de esto, se prevé un crecimiento en la superficie de cultivo en Almería, con un aumento en las ventas de pepinos para el ciclo temprano. Existe una creciente demanda de pepino desnudo en mercados como Alemania, lo que plantea preocupaciones en términos de postcosecha. En cuanto al pepino mini, se enfrenta a problemas de inflación y se plantea la posibilidad de democratizar este producto en los mercados para hacerlo más accesible.
“Los retos a los que nos enfrentamos en estos momentos las casas de semillas son el pulgón, que se ha convertido en una plaga y es un vector de virus, y la postcosecha”, comenta Pablo García, técnico Comercial de Ramiro Arnedo. Quien recomienda a los productores a utilizar fauna auxiliar y soluciones químicas permitidas de origen ecológico para controlar la plaga de manera preventiva.
Al igual que el pepino, el calabacín se enfrenta a restricciones en el uso de materias activas y desafíos relacionados con enfermedades y virosis. El problema del pulgón también ha complicado aún más su cultivo. Enfatizan la importancia de anticiparse a estos problemas a través de la lucha integrada y tratamientos preventivos.
El objetivo de mejorar las resistencias del calabacín sin comprometer la calidad es un desafío para la empresa, que también se centra en el equilibrio entre las resistencias durante el proceso de selección y mejoras.