El sector de la IV y V Gama ha experimentado una gran revolución en los últimos años. A diferencia de lo que ocurrió en la I Gama durante la crisis, este sector al que nos referimos no solo ha mantenido en positivo sus niveles de crecimiento, sino que ha acelerado el desarrollo de nuevos productos con la clara intención de atraer a un consumidor cada vez más exigente y que ademas ha incorporado otros parámetros a su lista de demandas: productos sanos, de máxica calidad, sabrosos, divertidos, y que respeten el medio ambiente.
Atrás queda la bolsa de lechuga monoproducto para dejar paso a multitud de mezclas donde se incorporan toppings o incluso los denominados superalimentos como la quinoa o el kale.
Sin embargo, mientras que el desarrollo de la IV Gama en vegetales u hortalizas parece imparable, la oferta en frutas se reduce a un par de referencias, pues si bien es cierto que de forma constante llegan al lineal nuevas presentaciones, son escasas las que sobreviven a su primer año de vida.
El momento de la V Gama
Considerado ya maduro el sector de la IV Gama, parece que es ahora el momento de la V Gama. Y es el que consumidor quiere más, demanda productos que con un solo toque de microondas, le permitan crear un menú completo. De esto entienden bien en Huercasa, pioneros en este segmento de negocio. Sin embargo, su presidente Félix Moracho reconoce que uno de los fallos del sector es no saber comunicar a la distribución, primero, y al consumidor después, el valor añadido que aportan estos productos.
Papel clave de la gran distribución
Según la Consultora IRI, en 2016, la compra de productos de IV Gama en la gran distribución creció un 3% en volumen, al comercializarse más de 67.000 Tn, con un valor cercano a los 442 millones de € (+8%). Estos datos son el resultado de la fuerte apuesta de la distribución por incorporar referencias al lineal refrigerado hortofrutícola, y que este vaya ganando metros cuadrados: actúa como reclamo, atrayendo sobre todo a ese consumidor joven que no quiere perder tiempo en la preparación de su comida, pero que no por ello está dispuesto a renunciar a una alimentación sana. “De media, dedicamos solo 26 minutos al día a comer, por lo que tenemos que facilitar esa tarea y además hacerla saludable y atractiva”, nos comenta Jordi Estrada, director comercial de Primaflor.
Un futuro prometedor
Según varios informes internacionales, el futuro para el sector de la IV y V Gama se presenta inmejorable. La sociedad necesita estos productos, de ahí que la gran distribución esté realizando verdaderos esfuerzos por ampliar su surtido, aunque sea con MDD (marca del distribuidor).
Soluciones para el consumidor
Los grandes productores y comercializadores ya no hablan de IV ó V Gama, sino de soluciones para el consumidor. De entre todas las presentadas en 2017, destacamos la gama de productos ¿Y Sí? De Bouquet, la oferta de flores comestibles de Frutas Olivar o Tu Plato Mediterráneo, de Primaflor. En V Gama, resulta casi abrumador las nuevas presentaciones de este pasado año: cremas de verduras (Huercasa, Línea Verde, Bouquet), gazpachos y salmorejos (Vicasol, Biosabor), smothies vegetales (Verdifresh); pimientos asados o productos disecados (Unica Group). Todos dinamizan una sección que sin embargo no encuentra un espacio físico claro en la gran distribución.