Puertas abiertas
El personal técnico de ANBGCM Material Vegetal y de CVVP han ofrecido en este mes de enero varias presentaciones de la variedad. En el caso de Orihuela (Murcia), con Ildefonso Riquelme y con Miguel Ángel Muñoz, en Burguillos (Sevilla), los agricultores e interesados en Leanri pudieron conocer de cerca el estado de desarrollo actual. Tras ello siguió un coloquio entre todos los asistentes, donde se compartieron las experiencias, bondades y desafíos de las distintas zonas de cultivo, así como los manejos seguidos en cada zona. Además, la distribución, otra de las partes interesadas en este lanzamiento, se mostró sorprendida al probar la fruta de esta variedad. Su forma, tamaño, sabor y aromas, suponen una nueva experiencia para el consumidor. Una frase recurrente sobre Leanri «quien prueba, repite», lo que resume el sentir sobre la variedad.
El modelo integrado de comercialización de Leanri en la Cuenca del Mediterráneo es abierto y cuenta en estos momentos con una superficie de cultivo es de 3.000 hectáreas, con previsión de crecimiento hasta un total de 4.000 hectáreas hasta 2025.
A partir de esa fecha, se evaluará la posibilidad de aumentar las plantaciones, dependiendo de la demanda de los mercados y siempre manteniendo la calidad de la fruta y la rentabilidad de la variedad para productores, comercializadores y comercios. Actualmente manejan un aforo de 15.000 toneladas, para esta campaña, aunque irá creciendo en los próximos años, serán el mercado y la rentabilidad del productor los que determinen la evolución de la variedad.
«Estamos seguros de que será una mandarina premium en distintos mercados locales e internacionales»
Características
Con una recolección que se sitúa entre diciembre y febrero, dependiendo de la zona de producción, Leanri ofrece a los agricultores calibres de mediano a grande, de color naranja intenso, de una calidad excepcional, de piel lisa, con un alto contenido en azúcar (15ºBrix) que compensa a la perfección con su acidez y le confiere su excepcional sabor, de bocado crujiente y limpio, y alto contenido en zumo.
Prácticamente sin semillas en condiciones de polinización cruzada. Esta gran cualidad de la variedad permite cultivarla rodeada de otras, respetando el medio ambiente, al poder evitar los tratamientos para alejar insectos polinizadores.
Con fácil y limpio pelado, presenta una gran capacidad de conservación postcosecha, esta característica permite que se pueda alargar su campaña. “Estamos seguros de que será una mandarina super premium en distintos mercados locales e internacionales”, explican desde la compañía.
La variedad se adapta a la mayoría de las condiciones donde se cultivan cítricos, si bien se desaconseja su cultivo en zonas húmedas y sin ventilación, ya que presenta cierta sensibilidad al hongo Alternaria, se trata de un cultivo sostenible y totalmente respetuoso con el medio ambiente, con un menor aporte de insumos, conservando su excelente calidad.