En la última campaña Francia importó un 7,6% más en volumen por un valor que creció un 27,5%.
El viernes 26 de abril, productores de tomate de Francia han organizado, en supermercados de distintas ciudades del sur del país, actos para protestar por la mayoritaria presencia de tomate marroquí en los lineales, que no cuentan con un etiquetado claro sobre el origen del producto, “una situación favorecida por los acuerdos aduaneros ineficaces y por una legislación sobre el origen de las frutas y hortalizas insuficiente para una buena información a los consumidores”, según ha informado en un comunicado la AOP Tomate et Concombre de France y Légumes de France.
Ambas organizaciones ya denunciaron, en enero, que la importación de tomate marroquí ha crecido fuertemente en Francia, subiendo un 7,6% en volumen y un 27,5% en valor, en la última campaña de 2022/2023 respecto a 2021/ 2022, totalizando 424.690 toneladas y 168 millones de euros respectivamente, debido en gran medida a la ausencia casi total de controles arancelarios y la ausencia de protección del mercado comunitario.
Exponían, además, que Marruecos está entre los países clasificados con “estrés hídrico elevado”, que sufre en 2024 el sexto año de sequía, apuntando también que el desarrollo del riego previsto en el marco del Plan Marruecos Verde contribuirá a la sobreexplotación de la mayoría de las aguas subterráneas y del descenso alarmante de acuíferos.
Para la AOP, los bajos costes de la mano de obra en el país magrebí y la falta de claridad en el etiquetado del producto importado son también causa del aumento de la competencia.
Junto a las acciones llevadas a cabo este año, el sector del tomate de Francia y de hortalizas en general se han manifestado públicamente contra la competencia marroquí en diversas ocasiones. El 8 y 9 de septiembre de 2022, productores de Légumes de France llevaron a cabo distintas acciones de protesta en la región del Bouches-du-Rhône para denunciar “la competencia desleal de las producciones marroquíes”.
La competencia descontrolada del tomate originario de Marruecos en el mercado comunitario ha sido uno de los temas abordados en la última reunión del grupo de contacto de Francia, Italia y España, que tuvo lugar el 16 y 17 de abril, en Almería. En la reunión, FEPEX expuso que el fuerte incremento de las importaciones en la UE, con un crecimiento del 42% en la última década, situándose en 491.908 toneladas, está impulsando la reducción de la producción de la UE y las crisis de precios continúas. Por ello, los sectores de los tres países consideran necesario, entre otras medidas, que la Comisión Europea aplique los mecanismos que existen en el Acuerdo de Asociación con Marruecos para evitar estas perturbaciones en el mercado y que se trata de las medidas de salvaguardia.