La Consejería de Agricultura y Ganadería, con el objetivo de que Castilla y León cuente con una Interprofesional de la Patata, vuelve a apoyar su creación e insiste en la necesidad de la misma para mejorar la comunicación y la organización del sector, para ganar competitividad y garantizar la sostenibilidad de las explotaciones y de la industria transformadora.
Por este motivo, y tras no haberse logrado, de momento, sacar adelante la Interprofesional de la Patata al no otorgar el sector productor la representatividad exigida a la candidatura única integrada por las organizaciones profesionales agrarias Asaja, la Alianza UPA-COAG, UCCL y Urcacyl, que no ha alcanzado el 51 % del respaldo necesario por parte de los cultivadores, la Consejería de Agricultura y Ganadería quiere, de nuevo, ayudar a impulsar este órgano a través de una nueva edición del Boletín de la Patata que se está enviando estos días.
Así, en el Boletín que los productores recibirán estos días vuelve a incorporar un documento de respaldo con el fin de que los cultivadores que aún no ha apoyado esta iniciativa, tengan la oportunidad de hacerlo, firmando y enviándolo en el sobre adjunto.
Con la intención de que este órgano saliese adelante, la Consejería de Agricultura y Ganadería organizó además, hace un año, una serie de charlas informativas en las principales zonas productoras de patata para explicar a los agricultores toda la información necesaria sobre la Organización Interprofesional de la Patata de Castilla y León, promovida por las organizaciones profesionales agrarias, Urcacyl y la Asociación de Operadores de Patata en Origen y que la Junta de Castilla y León impulsa por los beneficios que puede aportar al sector.
La Interprofesional de la Patata es una herramienta de autorregulación que permitirá conseguir la sintonía entre la producción y el consumo, y podrá ejecutar actividades que redunden en beneficio de todos los agentes del sector, que serán los que integren, exclusivamente, este órgano a través de dos ramas profesionales: la productora –pendiente de conseguir el apoyo de los cultivadores– y la de la transformación y la comercialización –que cuenta con el respaldo exigido–.
Este órgano será la voz oficial del sector, caracterizado hasta ahora por la volatilidad de los precios y la incertidumbre sobre las rentas de los productores.
Entre las numerosas funciones que tienen las interprofesionales se encuentra la de velar por el buen funcionamiento de la cadena alimentaria, favoreciendo buenas prácticas en las relaciones entre sus socios;ejecutar actuaciones que mejoren la transparencia de los mercados, poniendo en común información de interés; promover medidas para regular la oferta y mejorar el equilibrio de la cadena; y racionalizar el uso de medios de producción.
Pese a que la Interprofesional es una organización de ámbito privado, ajena al sector público, es la Administración autonómica la que aprueba su reconocimiento, la incluye en el registro correspondiente y aprueba las extensiones de la norma. Además, este órgano es un interlocutor válido del sector ante la Administración y ésta se apoya en ella para impulsar el desarrollo del sector.
El boletín de la patata incluye, además, información sobre la polilla guatemalteca, puesto que aunque Castilla y León está libre de este organismo nocivo, siempre es recomendable recordar y extremar las medidas de precaución que prevengan de la entrada de esta plaga en la Comunidad.
Fuente: www.lapatata.es