Estos dos cultivos han sido protagonistas de las Jornadas técnicas de Fruticultura que ha organizado el Ifapa en Cartaya, uno de los municipios agrícolas de mayor peso en la provincia de Huelva. Los técnicos analizan estos cultivos con vistas a llenar huecos de mercado con grandes posibilidades, tanto a nivel nacional como internacional.
Ernesto Machaconses, técnico especialista, ha sido el encargado de hablar sobre el caqui y Julián Bartual del Instituto Valenciano de Investigación Agrícola (IVIA) sobre el granado. Huelva cuenta con unas condiciones climáticas favorales para ambos lo que, a priori, augura unas producciones “interesantes”, en términos de rentabilidad.
Ernesto Machaconses empezó haciendo un resumen general del cultivo de caqui a nivel mundial. Uno de los puntos fuertes del caqui es que los países que son grandes productores, como China, Corea y parte de EEUU, prácticamente destinan su producción al autoabastecimiento. Así España encuentra en Israel su competidor más serio. Este país ha ido reduciendo su plantación conforme España ha seguido el camino contrario. Lo que ha hecho que nuestro país haya disparado la superficie de caqui en una década, pasando de 1.500 hectáreas en el año 2000 a unas 13.000, en la actualidad. El año pasado la producción rondó las 180.000 toneladas, auque la media se estima en unas 150.000 anuales.
Hay que entre 5 y 6 años a que el cultivo alcance su madurez de producción, lo que hace del caqui una apuesta de futuro a medio plazo. Entre la multitud de variedades que existen, en la actualidad, destacan las cualidades del caqui rojo brillante como las que más se ajustan a los gusto de los consumidores que reclaman una fruta dulce y de color vivo.
El 99% del producto se destina al consumo en duro, entre otras cuestiones porque la industria de transformación es muy escasa, lo que significa que el 20-30% de la producción que no sirve para la venta en fresco tiene que desecharse. Este es precisamente uno de los grandes inconvenientes del cultivo, junto a las dificultades de su manipulación, ya que es un fruto muy delicado, cualquier roce deja marca en la piel y le hace inservible para su venta en el mercado.
Sobre la recolección se extiende entre septiembre y febrero, aunque han comprobado, con muy buenos resultados, que mediante determinados manejos y tratamientos se puede alargar la relección entre 30 y 40 días, tanto al inicio como al final de la campaña.
Granado
Una de las grandes ventajas del Granado, según Julián Bartual, son los beneficios para la salud que se están divulgando por especialistas en nutrición. Como el caqui se estima que su producción anual está en unas 3,3 millones de toneladas y también son los países asiáticos los grandes productores: China, India e Irán. Salvo la India, los otros países no exportan. Pero para España el competidor directo está en Europa, es Turquía, país que en los últimos 8 años ha triplicado su producción, algo que ha animado también a Italia y Grecia a interesarse por este producto.
A nivel nacional la producción se sitúa en una media de 63.000 toneladas frente a las 45.000 que había hace apenas unos años.
Bartual ha subrayado que “el gran potencial del granado está en la producción ecológica de la que apenas existen 100 hectáreas en España y está muy bien reconocida en los mercados”.
Fuente: Agrodiariohuelva.es