«Busco un sistema que haga pagar a los camiones extranjeros», explicó Royal en una entrevista radio-televisada por «RMC» y «BFM TV», en la que justificó un dispositivo que grave específicamente a los transportistas de otros países, que no están sometidos a otros impuestos franceses, en particular el de los carburantes.
En ese caso, las sociedades concesionarias, «que fueron privatizadas por debajo de su valor y dan muchos beneficios, tendrían que hacer una aportación al presupuesto para financiar la construcción y reparación de infraestructuras de transporte, precisó.
Otra idea, inspirada del modelo suizo, sería que los camiones cuando entren en Francia deban abonar en la frontera una «viñeta», lo que evitaría todo el dispositivo de la polémica «eco-tasa», que está suspendido desde octubre pasado por las masivas protestas que se produjeron en contra, en particular en la región de Bretaña.
Con la «eco-tasa» se trataba de que los transportistas pagaran por la utilización de las carreteras exentas de peaje para financiar la construcción y la remodelación de la red viaria del país.
Royal, que tiene entre sus competencias el transporte y la energía, justificó una tasa específica para los camiones extranjeros porque dijo que no están sometidos a otros impuestos que sí afectan a los franceses, y en particular se refirió a los de los combustibles.
Señaló que muchos camioneros atraviesan Francia sin repostar, y lo hacen en países limítrofes -citó los casos de España y Luxemburgo- para pagar el carburante más barato.