Dentro de las actuaciones de promoción del Ajo Morado que viene desarrollando la IGP (Indicación Geográfica Protegida), se marcan el objetivo de llevar este sello de calidad de forma directa al consumidor para formar e informar acerca de cómo diferenciarlo de otras variedades con distintas propiedades y beneficios culinarios, considerado este como antibiótico natural y en cuanto a sabor, “cunde el doble”. Es el más apreciado en cocina por su intenso aroma, picor, sabor característico y mejor conservación, todo ello debido al gran contenido en alicina.
En estos mercados, que se incluyen en la Federación de Comercio Agrupado y Mercados de la Comunidad de Madrid, se enseñaron a diferenciar las etiquetas y buscar el distintivo de calidad europea y el logo de la IGP, para evitar así el fraude o la compra de imitaciones. Además de divulgar las peculiaridades del Ajo Morado, blanco por fuera porque el color lo lleva por dentro, es decir, cuenta con la primera capa de piel exterior blanca, mientras que la que envuelve los dientes homogéneos y blancos es de color morado intenso.
Sin embargo, la mayor confusión existe con el Ajo Spring violeta, una variedad temprana originaria de China y de un característico color violeta en forma de estrías que recubre sus pieles exteriores, pero del que se necesita más cantidad al cocinar para aportar el mismo sabor. A lo largo de dichas jornadas se repartirán regalos entre los nuevos seguidores en redes sociales y se podrá participar optando a premios en un juego de realidad virtual para conocer más sobre el origen y proceso que se lleva a cabo con el producto hasta que llega a la mesa. Además, estos días y en colaboración con las fruterías de estos mercados, los clientes que se hagan con esta variedad obtendrán un obsequio. De igual modo, continúa vigente un sorteo a través de Instagram (@igpajomorado) compuesto de un lote con delantal de la IGP y cabezas de Ajo Morado.
El Ajo Morado de Las Pedroñeras autóctono y cultivado desde los comienzos en la zona centro de Castilla-La Mancha, abarca territorio en las provincias de Cuenca, Toledo, Ciudad Real y Albacete. Con calidad certificada es uno de los productos más apreciados de Castilla-La Mancha, región considerada la despensa de la Dieta Mediterránea, la más saludable del mundo y Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.