Desde hace varios años, FruitVegetablesEUROPE y sus miembros vienen expresando el impacto devastador del Acuerdo UE-Marruecos en el mercado del tomate de la UE, debido al incumplimiento y la no aplicación de las medidas previstas en el Acuerdo. Hay verdaderas preocupaciones con respecto al método de cálculo del valor de importación de los tomates marroquíes, la necesidad de celebrar consultas con las autoridades marroquíes, así como la necesidad de adaptar el contingente tras el BREXIT y el etiquetado y control de los tomates cultivados en el Sáhara Occidental. A pesar de las advertencias, la situación está empeorando. Esta dramática situación está poniendo en peligro la sostenibilidad del sistema completo de producción de tomate de la UE.
FruitVegetablesEUROPE sigue opinando que es urgente actuar para proteger al sector europeo de las frutas y hortalizas, y en particular al sector del tomate de la UE, de la competencia causada por los países terceros, que se ha producido por no seguir la legislación y los acuerdos comerciales.
En la carta, FruitVegetablesEUROPE (EUCOFEL), AOPn Tomate de France, FEPEX y DPA indicaron que la actuación de la Comisión es absolutamente necesaria en lo que se refiere al incumplimiento y la no aplicación de las medidas previstas en el Acuerdo UE-Marruecos.
Por ello, FruitVegetablesEUROPE ha pedido a la Comisión Europea:
- Modificar el método de cálculo utilizado para calcular el valor de importación de tomates de Marruecos, utilizando solo los precios de los «tomates redondos»
- Aplicar adecuadamente la cláusula de cooperación (art. 4) y la medida de salvaguardia (art. 7) para tener una efectiva aplicación del Acuerdo.
- Celebrar consultas con las autoridades marroquíes para garantizar que se alcancen los objetivos previstos en el Protocolo.
- Supervisar el pago de los derechos ad valorem.
- Precisar, normalizar y auditar la forma de recogida y cálculo del precio de los tomates marroquíes en la UE, con el fin de que los precios del valor de importación a tanto alzado comunicados por los Estados miembros reflejen con exactitud la realidad de los mercados de la UE.
- Adaptar la cuota asignada por la UE a Marruecos tras la retirada del Reino Unido de la UE.
- Monitorear las importaciones de tomate del Sahara Occidental mediante análisis de isótopos y solicitar un etiquetado especial para evitar el fraude de origen.
La secretaria general de FruitVegetablesEUROPE, Alba Ridao-Bouloumié, declaró que «La pandemia del COVID-19 demostró que salvaguardar el acceso al consumo de frutas y hortalizas frescas producidas en la UE debe ser una prioridad para los consumidores europeos y, por tanto, para la Comisión Europea. Para hacer frente a futuras emergencias, debe existir un sector de frutas y hortalizas sólido y resistente. Con su inacción y pasividad, la Comisión Europea contribuye activamente a la muerte del sector del tomate de la UE. La agricultura europea no puede ser rehén de la política migratoria de la UE».
El presidente de AOPn Tomate de France y vicepresidente de FruitVegetablesEUROPE, Laurent Bergé, destacó: «hay que adaptar la cuota tras el BREXIT. La cuota de la UE-27 se mantuvo en 285.000 toneladas a pesar de la retirada del Reino Unido de la UE. Además, el Reino Unido ha concedido a Marruecos una cuota de 47.510 t. A pesar de ello, la Comisión no ha corregido la cuota y no ha deducido la cuota concedida por el Reino Unido a Marruecos. Creemos que el nuevo cupo debió ser de 237.490 t y no de 285.000 t y en consecuencia pedimos una corrección.
El director general de la FEPEX, José Maria Pozancos indicó: «El Acuerdo UE-Marruecos establece claramente que las concesiones incluidas en él, tanto la tasa de cuota de 285.000T como la reducción del precio de entrada, tienen como objetivo mantener el nivel de las exportaciones tradicionales y evitar perturbaciones en el mercado. Sin embargo, esto no se respeta, ya que las importaciones de tomates marroquíes en el mercado de la UE han aumentado constante y significativamente en los últimos años (el nivel tradicional fue de 332.231 t – promedio 2009-2011), provocando también graves perjuicios a los productores comunitarios sin que se aplique tampoco la medida de salvaguardia prevista en el Acuerdo con el fin de evitarlos”.
Por último, Wim Rodenburg, de la holandesa DPA, destacó que «El origen de los tomates cultivados en el Sáhara Occidental debe ser controlado por la UE y debe establecerse un etiquetado especial para distinguir los productos procedentes de Marruecos y del Sáhara Occidental. El control se puede hacer por ejemplo mediante análisis de isótopos, hay una legislación estricta en la UE que ordena que el etiquetado de origen se haga correctamente y si no, esto es fraude lo que condenamos enérgicamente».
Coincidiendo con el envío de la carta a la Comisión Europea, ayer, también tuvo lugar una reunión del grupo de expertos de tomate de la Comisión, en la que intervino FEPEX y se analizó la crítica situación del tomate en la UE.